Se cerró el acceso a la Garganta del Diablo; el río Uruguay creció a un promedio de 40 centímetros por hora.
Importantes lluvias en aguas arriba generaron una fuerte crecida en las Cataratas del Iguazú. Las imágenes captadas muestran la voracidad del agua y la intensidad de la fuerza del río.
A raíz de esta situación, se cerró el paso a la Garganta del Diablo. Esta decisión dependerá del nivel de agua, por ende, del clima.
Este fenómeno ocurrió por la suba del caudal del río Iguazú. Este volumen de agua rápidamente avanzó y perjudicó a otros sectores como la comunicación de determinados lugares a través del río Uruguay. Creció a un promedio de 40 centímetros por hora, pero no se produjeron evacuados hasta el momento.
Este escenario complica el circuito del parque nacional. El agua llegó a los balcones de la Garganta del Diablo. Atilio Guzmán, intendente del Parque Nacional Iguazú, confirmó la medida, que se tomó y dijo en Radio EME: “El agua sigue pasando por arriba de la pasarela”.
También, agregó que hace diez días que no llovía en toda la cuenca y el panorama es alentador. “Dependemos exclusivamente de las condiciones climáticas. La última vez que tuvimos que cerrar un circuito fue en julio aproximadamente”, agregó.
El resto del paseo sigue abierto y recibiendo turistas. Se trata del Circuito Inferior y el Circuito Superior.