El déficit hídrico golpea fuertemente a las provincias de Santa Fe, Córdoba y Buenos Aires. Hay 7 millones de hectáreas en condición de “sequía severa”.
“Tenemos ahora un déficit de lluvias más bajo del que tuvimos entre 2007 y 2009, cuando se registró la última gran sequía”, puntualizó la encargada de la Oficina de Monitoreo de Emergencias Agropecuarias de la Secretaría de Agricultura, María de Estrada.
Desde la Sociedad Rural de Rosario aseguraron que el campo afronta “la sequía más importante de los últimos 70 años” y expresó su “extrema preocupación por el sector agropecuario”, al tiempo que reclamó políticas y medidas urgentes para el norte de Buenos Aires, sur de Santa Fe, y sudeste de Córdoba.
La organización afirmó que las lluvias caídas en lo que va del año “representan tan sólo un 15% de las lluvias promedio, que generalmente rondan los 200 mm para enero y febrero”.
Al presentar un informe sobre Perspectivas Climáticas, la funcionaria puntualizó en que la sequía comenzó a hacerse fuerte durante julio en el sur de las provincias de Córdoba y San Luis, pero luego hubo un corrimiento hacia el este, que terminó impactando en la región agropecuaria más productiva del país.
Según de Estrada, “hay condiciones de déficit hídrico en la zona central del país, que para revertirse requieren la ocurrencia de lluvias superiores a las normales, que no están siendo pronosticadas por ninguno de los modelos disponibles”.
El trigo es el cultivo más afectado por la sequía
“Con un consumo interno en las 6,5 millones de toneladas y Declaraciones Juradas de Venta al Exterior (DJVE) ya aprobadas a exportadores por casi 9 millones, estar con una producción inferior a las 16 millones enciende todas las alertas”, señaló Dante Romano profesor adjunto de la Facultad de Ciencias Empresariales de la Universidad Austral .
Según la última estimación de la Bolsa de Cereales de Buenos Aires, la producción de trigo cae a 15,2 millones de hectáreas. “El 56 % del área reporta una condición hídrica regular/sequía”.
En Córdoba, la producción de trigo en Córdoba sería la más baja en 12 campañas e implicaría una pérdida de US$ 496 millones, según informó la Bolsa de Cereales de Córdoba.
Con un rendimiento promedio provincial estimado en 17,4 qq/ha, el volumen de producción rondaría en 1 millón de toneladas, siendo un 75% menor que la campaña anterior y 63% menor al promedio de los últimos 15 años.
Según la entidad cordobesa, esa producción “sería insuficiente para la industria molinera local, y resultaría en ingresos mínimos de 9 campañas para la provincia. Los elevados precios asegurarían un margen bruto positivo para el cultivo, aunque casi un tercio menor al de la campaña pasada”.