Alejandro, dueño de la casa lindera a la dependencia policial, relató en Radio EME el terrible momento atravesado. “Estaban vestidos de policía y buscaban algo erróneo que acá no existía”, señaló.
Un conmocionante episodio policial se registró este jueves en Arroyo Leyes. Durante la madrugada se produjo un golpe comando en la Sub comisaría Nº 20, donde siete personas redujeron a su personal y le sustrajeron sus armas. Además se llevaron un móvil policial del destacamento situado sobre Ruta 1.
Luego el operativo criminal prosiguió hacia una vivienda cercana, ubicada a 50 metros de la seccional policial, e ingresaron a su interior. Tras someter a los dos habitantes de la casa, los malhechores no consiguieron dar con el supuesto botín en moneda extranjera por el que llegaron y se dieron a la fuga en el automóvil de la familia asaltada.
Posteriormente se desarrolló una persecución policial con disparos de arma de fuego y luego dejaron abandonados a los dos vehículos sustraídos: el patrullero en Villa California y el auto particular en el bañado de La Guardia.
Golpe comando en Arroyo Leyes: asaltaron la subcomisaría, robaron un patrullero y varias armas
Al respecto de lo sucedido, Alejandro, dueño de la casa lindera a la dependencia policial, situada sobre el kilómetro 14,5 de Ruta 1, relató en Radio EME el duro momento atravesado: “Me levanté y vi que seis personas se movían hacia la puerta de entrada. Venían todos armados. Con armas cortas y largas”.
A su vez, detalló: “Apenas entraron nos pedían dinero. Le di el poco efectivo que tenía. Querían más pero no teníamos. Les ofrecí la plata que tenía en el banco y no quisieron. Buscaban algo erróneo que acá no existía. Dónde están los dólares me decían. Dos estaban vestidos de policía”.
En tanto, la víctima del asalto indicó que los autores del hecho eran presuntamente jóvenes. “Nos golpearon levemente. A mi esposa también. Estábamos durmiendo cuando pasó esto”, mencionó.
“Me pude desatar en el acto y llegó la policía en segundo. Los efectivos víctimas no estaban haciendo nada. No estaban atados y no llamaron a la central. No hubo indicios que haya pasada algo por la fuerza”, afirmó.