Una nutricionista santafesina dijo que el ayuno intermitente es una herramienta, y que como tal puede ser buena o mala dependiendo de cómo se use. El patrón de ayuno dependerá de la persona, sus objetivos, si hay una enfermedad de base y también sus deseos.
El ayuno intermitente es una práctica que desde hace algunos años se ha vuelto tendencia, pero tiene raíces ancestrales. Los pueblos han ayunado como práctica, fundamentalmente religiosa, desde hace cientos de años. Sin embargo, de acuerdo la opinión de la Licenciada en Nutrición Virginia Yódice (Mat. N°619) es,pecialista santafesina, puede generar autofagia, que es una forma de limpiar el cuerpo y reciclar y depurar sustancias indeseadas de nuestro sistema.
En este sentido, explicó “el ayuno tiene por finalidad la depuración del cuerpo” y dijo que “es bueno y saludable”. Se trata de “un mecanismo a través del cual se da un reposo”, favorece la limpieza celular, pero además tiene otras ventajas.
Sobre el ayuno intermitente
Consiste en ayunar (solo ingerir líquidos sin azúcar ni edulcorantes) durante al menos 16 horas y concentrar las comidas en lo que se llama la “ventana alimentaria”. La especialista recomienda hacerlo a conciencia tratando de complementar con que la alimentación sea saludable, puesto que hay muchos casos donde sin cuidados. “Se pierde masa muscular si se lo hace de forma sostenida sin reparar que lo que se come, cuándo se come. Debe ser de calidad para cubrir los requerimientos, en especial de proteínas. Un patrón simple para comenzar es tener una última comida a las 18 y recién desayunar a las 10 del otro día, o cenar a las 20 y almorzar a las 12”, comentó.
Asimismo dijo que cada persona es única y es difícil generalizar cada cuánto. Se propone que si bien algunos ayunan a diario “naturalmente” (porque no desayunan) tener presente que al igual que el ejercicio, si siempre es el mismo patrón. La búsqueda es el descenso de peso, eventualmente se genera un acostumbramiento, lo que estacará el proceso.
Por eso también es útil entender que bajar de peso no tiene una herramienta mágica, sino un paquete de hábitos donde alternar días de ayunos puede ser de ayuda, siempre claro, que la persona le guste, lo desee y sienta le hace bien para descansar su aparato digestivo, controlar su ansiedad y mejorar su energía.
Fuente: El Departamental