La falta de divisas impacta sobre las importaciones del sector y también lo afecta la sequía, según un informe de la Fundación FIEL.
La actividad fabril creció sólo 1 por ciento en el primer bimestre del año. Eso refleja una desaceleración del sector fabril, según un informe de la Fundación FIEL. En febrero incluso, el índice de producción industrial retrocedió 1,5% en forma interanual. En dicho período, el desempeño de los sectores fue diverso.
Entre los sectores, el mejor desempeño lo volvió a mostrar la industria automotriz, con un marcado avance en la producción y las exportaciones. También tuvo un buen registro de actividad el sector de los minerales no metálicos, mientras los químicos y plásticos vuelven a mostrar una importante caída.
En cuanto al avance de los sectores en el periodo enero-febrero, la industria automotriz continúa encabezando el ranking de crecimiento. Cuenta con una mejora interanual acumulada de 30.5%. Escalones más abajo se coloca la producción de minerales no metálicos con un alza de 18.5%; es seguida de las industrias metálicas básicas (+14.2%); la refinación de petróleo (+13.9%); la producción de papel y celulosa (+3.5%); la metalmecánica (+2.0%); y la de insumos textiles (+1.1%).
En cuanto a la evolución de la producción por tipo de bienes, el avance de la producción de vehículos utilitarios y otros equipos determinan que los bienes de capital pasen a liderar el ranking de crecimiento con una mejora acumulada de 15.1% en el primer bimestre del año y en la comparación interanual. Le sigue la producción de bienes de consumo durable con una mejora de 9.7% en el bimestre.
Por su parte, la producción de bienes de consumo no durable iguala (-0.2%) el nivel de actividad de los dos primeros meses del año pasado. Mientras, los bienes de uso intermedio acumulan un recorte de 2.1% en el mismo período y en la comparación con un año atrás.
Las perspectivas de corto plazo señalan que la actividad industrial continuará transitando un sendero de debilidad. El impacto de la sequía sobre la generación de divisas se ha profundizado, al tiempo que el sostenido proceso inflacionario afecta el ingreso real y la capacidad de compra del público.
La decisión del BCRA de elevar las tasas de interés resultará en un encarecimiento del crédito, sumando presiones hacia una mayor contracción del consumo, la inversión y la producción.
Fuente: NA