El intendente de Roldán, Daniel Escalante, fue amenazado y agredido por un vecino que viviría en una de las casas que denunció en el Juzgado Federal de Rosario por ser un búnker de venta de drogas y que tiene antecedentes penales.
“Nunca me pasó algo así, es la primera vez en la vida que tengo un problema con alguien”, confió el jefe comunal a La Capital y confirmó que radicó la denuncia en la Comisaría 6º de la ciudad.
El episodio ocurrió este jueves cerca de las 16.45 en el centro del casco urbano cuando Escalante iba caminando hacia su consultorio odontológico, ubicado en Malvinas al 100, para atender a una niña que lo estaba esperando.
“Estacioné el auto en la cortada de la plaza San Martín y crucé en diagonal. En ese momento pasó un tipo en bicicleta y me gritó: ‘Vos sos Escalante? Le respondí que sí y comenzó a insultarme; alta rata sos, hijo de puta, yo soy el marido de fulanita de tal a la que dejaste sin trabajo’”.
“Sigo caminando, el hombre dejó la bicicleta en la calle y se me apareció por atrás. Le dije tomatelas, déjame tranquilo y cuando me doy vuelta para entrar al consultorio, me pegó una patada en la pierna izquierda”.
“Le respondí ahora te denuncio, me siguió puteando y luego se fue”. Según el entorno de Escalante, el hombre viviría en uno de los puntos que denunció para que se investigue por venta de drogas y la propiedad sería usurpada. En tal sentido, Escalante reconoció que no podía tener trabajando en el municipio a una persona que estaría residiendo en un domicilio vinculado a comercialización de estupefacientes.
Según fuentes policiales, el agresor tiene antecedentes penales. Tiempo atrás recibió un balazo en un episodio delictivo y sufrió una lesión física de por vida. También es conocido por los vecinos por hacer recurrentes desmanes en lugares públicos, como una estación de servicios cercana a su domicilio.
“Radiqué la denuncia por mi familia y por mi integridad”, contó el jefe municipal y confirmó que dentro de los consultorios, en cuya puerta ocurrió el episodio, se encontraba su esposa que también es odontóloga junto con otras profesionales.
Según datos policiales, el agresor debe ir a firmar a la seccional local periódicamente para reportarse. “El comisario me pidió datos de quienes vieron el episodio y me llamó el jefe de Unidad de la Jefatura San Lorenzo para avisarme que van a patrullar por mi casa y el consultorio. También me dijo que la justicia ya estaban trabajando en el tema. Yo lo que tenía que hacer lo hice, ahora está en manos de la Fiscalía”, finalizó Escalante.
Fuente: La Capital