La prohibición de fumar marihuana en las calles del barrio rojo de Ámsterdam entró en vigor este jueves y forma parte de un impulso de la primera alcaldesa de la ciudad para limpiar el área.
Se colocaron letreros en el vecindario bordeado de canales conocido por sus burdeles, clubes de sexo y cafés de marihuana, que atraen a millones de turistas al año, pero son una molestia para los residentes.
Las personas sorprendidas violando la prohibición ahora corren el riesgo de recibir una multa de 100 euros (110 dólares).
Fuente: NA