La falta de plata en los cajeros automáticos y las largas filas para tener algo de efectivo en la billetera, es un tema de larga data. Pero más allá de los momentos clave como los días de cobro, los principios de mes y los fines de semana (sean largos o no), la inflación que corre por encima del 100% interanual comenzó a ocupar un rol importante y esto que antes era un tema de algunos días, comenzó a ser un problema para los clientes y para los bancos.
En el último tiempo, las entidades se vieron obligadas a duplicar la cantidad de veces que durante el día se reponen los cajeros automáticos. Así lo reveló uno de los bancos privados de primera línea. En el run run del sector comenzaron a demostrar su expectativa para que se concrete la llegada del billete de $2.000 a mediados de año – tal como está previsto- para agilizar la operatoria. Pero algunas entidades van por más: ya se piden billetes de mayor denominación.
¿Por qué la inflación comenzó a ser un problema más para los bancos? uno de ellos reveló que el casette o cartucho (caja metálica que contiene los billetes) es el mismo mientras que la necesidad de billetes se multiplicó debido a la inflación. “Si se hubiesen impreso billetes de mayor denominación esta no hubiera sido tan traumático como fue. Se hizo el doble de trabajo con costos mas altos que debieron afrontar los bancos”, revelaron.
Otro banco de primera línea explicó que desde octubre de 2022 a marzo de 2023 aumentaron un 68% el monto dispensado. Sin embargo, aclararon que “el aumento del monto va acompañando la inflación”. Otro de los inconvenientes que están teniendo es que los equipos requieren una mayor atención no solamente en la carga de dinero sino tmabién en las fallas: “al dispensar y tanto volumen de billetes, los equipos fallan más”, afirmaron.
Qué lugar ocupa en el problema los billetes de $1.000
Los datos del Banco Central revelan que los billetes de $1.000 son los que más se emiten desde octubre desde octubre del año pasado. El dato sobresaliente del mes de abril es la cantidad de billetes de $100 que están en circulación, superando con creces a los de $500.
De acuerdo a la Comunicación “C” 95027 del BCRA, se emitieron 3,175.2 millones de billetes de $1.000. El segundo lugar lo ocupó el billete de $100 (1,870.3 millones) y, por último los billetes de $500 (1,314.6 millones). Hoy, esos billetes de $1.000 equivalen a u$s2 a valor del dólar blue. ¿Pero es un problema tener tantos billetes de $1.000 en donde la gente requiere cada vez más cantidad para satisfacer sus necesidades de todos los días?
De acuerdo a uno de los bancos consultados, “no necesariamente”. “En comparación con el año pasado habia menos disponibilidad de billetes de alta denominación. Y el año pasado la problemática de billetes de $100 era mayor que ahora. No obstante el ritmo de inflación obliga a mantener la recarga permanente de cajeros”.
Por su parte, desde las cámaras empresarias de bancos afirman que el problema de la recarga de los cajeros va en dos fenómenos que juegan al mismo tiempo: “primero, el inflacionario y atado al inflacionario, la no actualización de los billetes de mayor nominación. Si bien está anunciado el de 2.000 pesos para este año, la verdad es que las cámaras vienen reclamando billetes de $5.000 y de $10.000”.
“Todos los cajeros se están tratando de abastecer con billetes de $1000 como para poder satisfacer la demanda de billetes de los usuarios del sistema, porque por supuesto cada cajero automático, como esto ya se ha contado muchas veces, tiene un límite de capacidad de billetes que pueden entrar en cada uno de los cartuchos. Entonces, por supuesto, hay un máximo que físicamente, es una limitante”.
Los pedidos al Banco Central
Desde las cámaras bancarias han realizado presentaciones formales al Banco Central reclamando por la problemática que tienen los bancos en la reposición de cajeros. Hasta el momento, la respuesta ha sido la emisión de billetes de $2.000 y, por el momento, según el Banco Central no está en agenda ningún otro billete.
Al mismo tiempo, desde los bancos solicitan que haya un retiro de circulación de billetes de mayor denominación: “ocupan las arcas de las entidades, ya no hay espacio de almacenamiento a los billetes, entonces es un problema del sistema que abarca a los bancos públicos, privados nacionales, privados internacionales, a todos”.
Hoy el día el problema con los billetes va más allá de los cajeros solamente. También tiene que ver también con una cuestión de costos de traslado de billetes, circulación y de guardado. “Es caro especialmente por el tema de los seguros, todo lo que es camiones de caudales y todos son costos que se trasladan a los usuarios del servicio financiero”, agregaron.
¿Ayuda el crecimiento de operaciones por medios electrónicos?
En el mientras tanto, la inclusión financiera sigue dando sus frutos. De acuerdo al último informe del Banco Central, los medios de pago electrónicos (MPE) continúa marcando máximos históricos. Cada individuo efectuó en promedio 17,8 pagos mensuales por MPE, valor récord que prácticamente triplica el registro previo a la pandemia. Se destacaron aquellos MPE cuyas comisiones son nulas o reducidas y la disponibilidad de los fondos es inmediata para el receptor (Transferencias y Pagos con Transferencia)”.
Las tarjetas de débito también vienen creciendo por encima de las de crédito, reduciendo la necesidad de contar con billetes. Según el informe de marzo, se efectuaron 177,1 millones de transacciones por $ 804,8 mil millones, representando variaciones del 12,3 % i.a. en cantidades y del -3,1 % i.a. en montos.
En este sentido, desde la Asociación de Bancos Argentinos (ABA) destacan que si bien están creciendo las operaciones con medios de pago electrónicos, “no alcanza a compensar el uso de dinero en efectivo en Argentina que sigue siendo alta”. Hoy en día el límite de extracción en efectivo en cajeros automáticos suele ser de hasta $40.000 y con el ritmo de inflación, queda cada vez más chico.
Fuente: Ámbito