Una de las formas utilizadas por la política para promover sus partidos e imágenes es a través del formato papel. El material se ve en demasía por las calles de cada ciudad y hasta ruta, ya sea mediante volantes, carteles, y más. Por ese motivo, Radio EME dialogó con Ana Laura Pino, Licenciada en Química y Mágiste en Ciencia de la Madera, Celulosa y Papel. Además, especialista en Gestión Ambiental y docente de Química Verde en la Facultad de Ingeniería Química de la Universidad Nacional del Litoral (FIQ-UNL).
La profesional comenzó destacando que: “Si el método fuera a través de papel sería un problema menor, el tema es que los volantes son de plástico. Los mismos no son bio-degradables, ni reciclables, y persisten en el ambiente generando un gran problema de contaminación en suelo, agua, ensucian espacios públicos generando un gran impacto”.
Por otro lado, la profesora profundizó sobre aquellos carteles que se encuentran colgados: “Son de plástico corrugado que tampoco es fácil de reciclar y proviene de los combustibles fósiles. Además, son plásticos de un solo uso, nada más, porque todo se modifica”: También analizó a los vehículos que generan una publicidad sonora: “Cualquier auto contamina con gases de efecto invernadero, lo que genera el calentamiento global, y estos circulan demasiado. Por dos semanas que un auto haga propaganda, los gases van a la atmósfera y permanecen por años”.
Finalmente, ante una posible solución, Pino dijo que se trata de “Una decisión muy sencilla y de sentido común. De hecho, hay un espacio que optó por hacer una campaña limpia y aportó a las redes. Hoy por hoy existen otras metodologías de comunicación para evitar el volante, el papel, los carteles, el auto. El mejor residuo es el que no se genera”: