Los puestos de trabajo de los asalariados no registrados sumaron el año pasado 5.330.750 de trabajadores, según informó el Indec a través del informe de “Remuneración al trabajo asalariado, ingreso mixto e insumo de mano de obra, por sexo y tramos de edad”. Esto equivale al 42,4% sobre un total de 12.575.655 de puestos laborales de asalariados en relación de dependencia privados.
Lo que quiere decir que cuatro de cada diez empleados que cobran un sueldo privado en Argentina están en negro. Con inseguridad laboral, sin obra social y con un problema a futuro respecto de la jubilación además del conflicto en el presente, ya que tampoco aportan para los jubilados actuales.
Hay además 5.612.703 puestos de trabajos independientes, que en una alta proporción son precarios e informales, en su mayoría monotributistas con dependencia encubierta.
Con estos números, los puestos privados sumaron 18.188.000: los asalariados privados registrados representaron el 39,8%, los no registrados el 29,3% y los cuentapropistas el 30,9%.
Comparando contra el año anterior, el empleo asalariado privado total aumentó de 17.010.00 a 18.188.000: son 1.178.000 más. De este total, 655.000 son asalariados no registrados. Los registraron aumentaron en 284.198. Y en el cuentapropismo, en su mayoría informal, aumentó en 240.000,
Todos estos datos oficiales que marcan el fuerte avance de la precarización y empobrecimiento de la fuerza de trabajo. Y unido al deterioro de los salarios, fue bajando el costo laboral y la participación de las remuneraciones del trabajo asalariado en el valor de la producción (facturación de las empresas).
El aumento del empleo privado durante todos estos años se concentró en los no registrados y en el cuentapropista que también tiene un fuerte registro de informalidad.