El cantante Elián Valenzuela, más conocido como L-Gante, sufrió este martes un nuevo revés judicial, luego de que la Cámara de Apelaciones de Mercedes le revocara el sobreseimiento por tenencia de drogas, por lo que también irá a juicio por esa causa.
Asimismo, quedó ratificada la decisión que había tomado el juez de Garantías de Moreno Gabriel Castro de enviar al cantante a juicio en la causa por amenazas y privación ilegal de la libertad por la que el músico estuvo preso casi un mes.
Como en el fallo los magistrados revocaron el sobreseimiento por el delito de tenencia simple de estupefacientes también será juzgado por ese hecho.
Los camaristas Oscar Reggi y Carlos Risuleo declararon inadmisible el recurso presentado por el abogado defensor de L-Gante, Diego Storto, quien había solicitado el sobreseimiento de su representado en la causa que instruyó el fiscal Raúl Villalba.
El impulsor de la cumbia 420 está imputado por los delitos de “amenazas simples en concurso real con privación ilegítima de la libertad, en concurso ideal con amenazas coactivas” en perjuicio de Darío Gastón Torres, y de “privación ilegítima de la libertad simple en concurso ideal con amenazas simples” respecto a Rosa Catalina Passi.
“Advertimos que los fundamentos expuestos en la apelación -reiteramos- reeditan en forma casi textual los formulados en la oposición a la elevación a juicio, la cual -obviamente- se presentó en la instancia de grado con antelación a que el a quo dictara el decisorio que hoy se impugna”, remarcaron los jueces.
L-Gante fue liberado el pasado 8 de septiembre tras permanecer casi 100 días detenido en la DDI de Quilmes.
La Cámara le revocó el arresto domiciliario y le confirmó la preventiva luego de que el fiscal Villalba y los abogados de las víctimas apelaron la liberación.
Pero la decisión de los jueces no implicó que el músico debiera volver de inmediato a prisión, ya que la medida fue apelada, algo que aún queda pendiente.
El artista había sido apresado en el country del Banco Provincia de General Rodríguez, en el marco de una serie de allanamientos que se realizaron en sus propiedades, en una causa donde se lo investigó por los delitos de privación ilegítima de la libertad y amenazas.
Lo acusaron de amedrentar a punta de pistola a dos empleados municipales, luego de que varios de los integrantes de la banda de amigos denominada La Mafilia fueron demorados tras un altercado con otro grupo a la salida de un boliche.
Tras salir de la cárcel, el músico declaró ante los medios y contó su vivencia tras las rejas. “Estar acá es más que nada para recapacitar y aprovechar el tiempo para pensar de buena manera, y que justicia se haga siempre”, señaló junto a Storto y a su manager, Maxi El Brother.