El gremio de colectivos de Rosario restableció el servicio tras varios días de paro por el brutal crimen de César Roldán, chofer de la línea 116 en la esquina de Eva Perón y Cullen.
Fue el sábado cuando se dio a conocer que sicarios le dispararon ocho veces al colectivero de 43 años. En un principio los investigadores sospecharon que se trataba de un conflicto gremial, pero con el paso de las horas la cuestión tuvo un giro inesperado.
Los peritos anunciaron que antes de escapar en una moto los sicarios dejaron una nota amenazante para “Valen” que se relaciona a un problema con un preso en la Cárcel de Piñeiro y no con el gremio en cuestión.
“Dejá de hacerte cuidar por la policía, gato”, decía la carta. Es por este motivo que remarcan que el crimen fue parte de un plan para que trascendiera el mensaje amenazador y le llegara al destinatario de forma violenta.
El velorio de Roldán comenzó el domingo al mediodía y finalizó este lunes a las 13.00 donde el féretro fue trasladado al cementerio Parque de la Eternidad de Granadero Baigorria.
En el trayecto, los compañeros de la víctima realizaron una caravana de colectivos desde Caramuto, la sala velatoria, hasta el cementerio.
Tiempo después los familiares contaron que aquella tarde Roldán tenía franco, pero pidió cambiar con un compañero ya que quería acompañar a su hijo a un partido de fútbol.
Fuente: NA
