Una vez consumado el descenso a la Primera Nacional, muchos hinchas en Colón empezaron a buscar culpables y uno de los jugadores más castigados fue Ramón Ábila. Si bien en el desempate con Gimnasia se mostró activo y hasta le anularon un gol, Wanchope fue blanco de críticas por sus recurrentes offisides y en Santa Fe ya saben que su ciclo está cumplido.
El experimentado delantero cordobés tiene contrato hasta diciembre del 2025, pero no seguirá en el Sabalero. El club recortará los contratos más elevados e imposibles de pagar en el nuevo proyecto deportivo del 2024 y el del N°9 es uno de ellos.
Después de perder la categoría, no tardó en llegar la primera llamada al teléfono de Ábila. Fue nada menos que de Instituto, donde debutó profesionalmente. “Nosotros tenemos abiertas las puertas. Sería un orgullo que vuelva Wanchope. Hay que ver la realidad de lo que puede pagar el club…Le mandé un mensaje al Negro sé que debe estar muy dolido”, expresó días atrás el presidente Juan Manuel Cavagliatto.
Sin embargo, la Gloria no es el único equipo de la Liga Profesional que posó sus ojos en él. En las últimas horas trascendió la noticia de que Barracas Central lo tiene en carpeta para afrontar la próxima temporada. El interés en Olavarría y Luna no es nuevo, ya que lo buscó en los mercados anteriores. Lo cierto es que cualquier interesado deberá sentarse a negociar con la dirigencia rojinegra para destrabar su salida.