Bajo la consigna #QueEntiendanLoQueLean, Argentinos por la Educación y más de 180 organizaciones de la sociedad civil relanzan el jueves 25 de abril la Campaña Nacional por la Alfabetización, cuyo objetivo es visibilizar lo que ocurre con la comprensión lectora en la Argentina, para que sea prioridad en la agenda educativa y se logre revertir la situación.
Según las últimas evaluaciones internacionales de UNESCO en las que participaron 16 países (pruebas ERCE 2019), en Argentina, el 46% de los chicos de 3er grado no entiende lo que lee. La cifra asciende al 61,5% entre los estudiantes de menor nivel socioeconómico. En nuestro país, sólo 1 de cada 10 alumnos (14%) se ubica en el nivel de desempeño más alto en lectura. Mientras que para la región, el promedio es 2 de cada 10 alumnos (21%). En Brasil (30%) y Perú (30,8%), 3 de cada 10 alumnos alcanzan el nivel más alto.
Ante estos resultados, el 4 de mayo de 2023 se lanzó por primera vez la Campaña Nacional de Alfabetización con la consigna #NoEntiendenLoQueLeen, con la adhesión y participación de periodistas, artistas y personalidades como Ricardo Darín, Emiliano “Dibu” Martínez, Pupi Zanetti, Paula Pareto, Eleonora Wexler, y muchos más, que se sumaron a la iniciativa compartiendo fotos y mensajes en redes sociales.
Este año, y con nuevas estadísticas, más de 180 ONGs, entre ellas Argentinos por la Educación, Asociación Conciencia, Educar y Crecer, Más Voces, Enseñá por Argentina, Fundación Leer, AMIA, Fe y Alegría, Minkai, Voy con Vos y Hablemos de Bullying, entre otras, se proponen reinstalar la Campaña para revertir la crítica situación educativa, entendiendo que se trata de un problema sistémico que atraviesa a todos los niveles socioeconómicos. Así lo confirman los resultados internacionales PISA 2022, que evalúa una muestra de estudiantes de 15 años de edad de 81 países, los cuales indican que el 32% de los alumnos de 15 años del nivel socioeconómico más alto no alcanzan el nivel mínimo de Lectura, mientras que la cifra asciende a 7 de cada 10 estudiantes en el nivel socioeconómico más bajo. Argentina sacó 378 puntos en Matemática, un punto menos que en la edición previa y casi 100 puntos menos de lo que obtienen, en promedio, los países que integran la OCDE. Argentina quedó en el puesto 66 de 81 países en Matemática. En Lengua y Ciencia, 5 de cada 10 estudiantes no alcanzaron los niveles mínimos de desempeño.
Argentina además está en desventaja en relación a otros países de la región. Los estudiantes argentinos más ricos, son los segundos más ricos de la región, y aún así tienen peores resultados en la evaluación PISA que sus pares de Chile, Uruguay, Colombia, Perú y México.
Si analizamos qué sucede a lo largo de las trayectorias escolares de los estudiantes, según datos de evaluaciones nacionales, observamos que sólo 43 de cada 100 alumnos que comienzan la primaria llegan a 6° grado a tiempo y con los aprendizajes esperados en Lengua y Matemática.
Al último año de la secundaria, son muchos menos los que llegan en tiempo y con los saberes esperados: sólo 13 de 100 chicos. Es decir que el problema de la falta de aprendizaje se va acrecentando. En el año 2022 solo el 21,5% de los estudiantes en edad teórica, lograron cumplir con los requerimientos satisfactorios tanto de lengua como de matemática. Esto representa una reducción significativa de 12,6 puntos porcentuales en comparación con los resultados del año 2019.
“Es muy común escuchar en ámbitos educativos que ‘los chicos llegan a la universidad sin hacer una regla de tres simple; o los chicos llegan a la secundaria sin comprender textos básicos’. Las Organizaciones que trabajamos en educación hace años venimos levantando la voz para que toda la sociedad tome conciencia que la base de todos estos diagnósticos es la alfabetización inicial. Es clave debatir y encontrar nuevos puntos de encuentro en el sistema educativo del país”. indica Marcelo Velázquez, Director de la ONG Más Voces.
El Director Ejecutivo adjunto de la Fundación León, Federico Díaz Marino, entiende que “Invertir en Programas de primera infancia reduce el gasto público del Estado y genera un futuro más prometedor en las comunidades. Todas las provincias deben tener un plan de alfabetización, debe ser un tema prioritario. Esto asegura que todos los niños y niñas de nuestro país puedan leer y escribir, un derecho básico del ser humano de acceder a la educación. Los procesos de alfabetización son, sin dudas, el punto de partida para poder desarrollar proyectos de vida genuinos y son además posibilitadores para el desarrollo personal y de las comunidades”.
Estefanía Alcaraz Clouet, Responsable del Programa Educativo de la ONG Educar y Crecer, explica que “La alfabetización es un aspecto del derecho a la educación y, por eso, es considerada un derecho humano, un recurso para la autonomía personal y un factor de desarrollo social y humano. Ser alfabetizado/a no es un estado sino un proceso sociocultural que nos permite interpretar sentidos, el mundo que nos rodea y comunicarnos. Cabe señalar que los programas de alfabetización se encuentran implementados, por lo general, con responsabilidad compartida de diferentes actores; en donde se ven involucrados tanto las organizaciones de la sociedad civil, el sector privado y el Estado como tal”.
Belén De Gennaro, Directora de Campañas de Argentinos por la Educación. relata: “El año pasado lanzamos la Campaña Nacional por la Alfabetización para visibilizar un enorme desafío para la educación: en Argentina 1 de cada 2 estudiantes no entiende lo que lee en 3er grado. Un dato duro que nos obligó a establecer prioridades para contribuir con la mejora de la comprensión lectora de nuestros estudiantes. Con esta convicción logramos que la alfabetización esté presente en el debate público y que tanto el gobierno nacional como más de la mitad de los gobiernos provinciales adhieran al Compromiso por la Alfabetización. Este año necesitamos redoblar la apuesta porque revertir el diagnóstico actual requiere del compromiso de toda la sociedad. En esa línea, esperamos contar con la adhesión de todas las provincias para que la alfabetización sea una prioridad en todo el país.”
“Revisar las puestas en acción de la alfabetización en la escuela argentina es, probablemente, la prioridad número uno de cualquier política educativa en la actualidad. Esto requiere desmontar ciertas frases hechas y observar, por ejemplo, la eficacia real de políticas tales como la unidad pedagógica, la posible circulación de interpretaciones erróneas del constructivismo como procrastinación sistemática o la necesidad de repensar la construcción de ambientes alfabetizadores en tiempos de cultura digital. Nos tenemos que animar a revisar prácticas sagradas y consagradas, apuntando a la necesidad de fortalecer el aprendizaje de la escritura y la lectura en temprana edad y en todos los sectores sociales, muy en particular en aquellos más desfavorecidos. Finalmente, es fundamental decir que no alcanza con pensar sólo en la escuela, estamos frente a un problema social donde clubes, barrios, parroquias y centros.
Escuchá la palabra de Pablo Mainer, fundador de Hablemos de Bullying: