La Argentina volvió a reclamar la detención internacional del ministro iraní Ahmad Vahidi, señalado por la justicia local como uno de los responsables del atentado a la AMIA de 1994, que provocó la muerte de 85 personas.
Vahidi, que es requerido por la Justicia argentina, es actualmente Ministro del Interior de la República Islámica de Irán e integra una comitiva gubernamental que se encuentra en Pakistán y Sri Lanka en estos días.
En ese marco, a pedido de las autoridades argentinas, la oficina Central de Interpol con sede en Lyon emitió una Circular Roja para su detención.
Con motivo de su viaje, Argentina ha solicitado a los gobiernos de Pakistán y Sri Lanka su detención de acuerdo a los mecanismos previstos por Interpol.
Paralelamente al trabajo que está haciendo el Ministerio de Seguridad y la Cancillería Argentina con la intervención de las Embajadas de nuestro país en Pakistán y la India, la Oficina Central Nacional Buenos Aires (OCN) de Interpol de la Policía Federal Argentina pidió a su contraparte OCN Islamabad que proceda a la detención preventiva del causante con fines de extradición a la Argentina.
Si bien no es la primera vez que se pide una detención a Interpol por el caso AMIA, sí es la primera que ocurre durante el gobierno del presidente Javier Milei.
Vahidi es señalado por la Justicia argentina como uno de los autores intelectuales del atentado, al haber supuestamente participado en una reunión en 1993 en la ciudad de Mahshad, donde se tomó la decisión de perpetrar el atentado en Buenos Aires.
“No se limitó a participar pasivamente del cónclave, sino que además cumplió un rol protagónico al proponer que nuestro país fuera el objetivo del ataque. Su sugerencia tuvo éxito ya que, efectivamente, dicha propuesta fue la que se sometió a examen del Comité de Asuntos Especiales”, asegura el dictamen del fiscal fallecido Alberto Nisman en 2006.
Siguen activas las circulares rojas en Interpol con el objetivo de lograr la captura internacional -aún sin éxito- de los ciudadanos iraníes por el ataque a la AMIA.