Tras una noche de intensos bombardeos aéreos y terrestres, Israel envió tanques al este de Jabalia, en el norte de la Franja de Gaza, a primera hora del domingo, causando la muerte de 19 personas e hiriendo a docenas más, según informaron las autoridades sanitarias.
El número de muertos en la operación militar de Israel en Gaza ha superado ya al menos los 35.000 palestinos, según el Ministerio de Sanidad de Gaza. Los bombardeos han asolado el enclave costero y provocado una profunda crisis humanitaria.
La guerra fue desencadenada por un ataque dirigido por Hamás contra el sur de Israel el 7 de octubre en el que murieron unas 1.200 personas y más de 250 fueron tomadas como rehenes, según los recuentos israelíes. Israel afirma que 620 soldados han muerto en los combates.
Jabalia es el mayor de los ocho campos de refugiados históricos de Gaza y alberga a más de 100.000 personas, en su mayoría descendientes de palestinos expulsados de ciudades y pueblos de lo que hoy es Israel durante la guerra árabe-israelí de 1948 que condujo a la creación del Estado de Israel.
A última hora del sábado, el ejército israelí afirmó que las fuerzas que operan en Yabalia están impidiendo que Hamás, que controla Gaza, restablezca allí sus capacidades militares.
“Hemos identificado en las últimas semanas intentos de Hamás de rehabilitar sus capacidades militares en Jabalia. Estamos operando allí para eliminar esos intentos”, declaró el contralmirante Daniel Hagari, portavoz militar israelí, durante una reunión informativa con periodistas.
Hagari también dijo que las fuerzas israelíes que operan en el distrito Zeitoun de la ciudad de Gaza mataron a unos 30 militantes palestinos.
“Los bombardeos aéreos y terrestres no han cesado desde ayer, bombardean por todas partes, incluso cerca de las escuelas que albergan a las personas que perdieron sus casas“, sostuvo Saed, de 45 años, residente en Jabalia.
“La guerra se está reanudando, así es como se ve en Jabalia”, señaló a Reuters a través de una aplicación de chat. “La nueva incursión obliga a muchas familias a evacuar”
El ejército volvió a enviar tanques a Al-Zeitoun, un suburbio oriental de la ciudad de Gaza, así como a Al-Sabra, donde los residentes también informaron de intensos bombardeos que
destruyeron varias casas, incluidos edificios residenciales de gran altura.
El ejército había afirmado haberse hecho con el control de la mayoría de estas zonas hace meses.
Las Fuerzas de Defensa israelíes indicaron que habían sonado sirenas aéreas en la zona meridional de Kerem Shalom y que habían interceptado con éxito dos cohetes lanzados desde las proximidades de Rafah. No se registraron heridos ni daños.
Más tarde, el domingo, sonaron sirenas en la ciudad israelí de Ashkelon debido al lanzamiento de cohetes desde Gaza, lo que indicaba que los militantes seguían siendo capaces de lanzar
ataques con cohetes tras más de siete meses de guerra.
La televisión Al-Aqsa de Hamás dijo en su cuenta de telegram que los cohetes se habían lanzado desde Jabalia, a pesar de la incursión activa del ejército.