Este jueves, la Defensoría del Pueblo y el Colegio de Arquitectura y Urbanismo Distrito 1 junto a las escuelas provinciales de música y ballet de la ciudad, realizaron un abrazo simbólico al edificio del Correo de Santa Fe, ubicado en Avenida 27 de febrero y Cortada Falucho de la ciudad capital.
“El edificio es parte del patrimonio y acervo cultural de la ciudad capital de la provincia y su estado de abandono expresa la desidia del Estado nacional en el cuidado de esa estructura icónica y patrimonial”, indicó Jorge Henn en el móvil de Radio EME.
En medio de la convocatoria sobre la Plaza Alberdi, Henn explicó: “Estamos pidiendo y exigiendo que queremos tener la conducción y decisión de lo que vamos a hacer con este edificio. Hay mucha memoria emotiva y tradición con este lugar”.
Por su parte, la Arq. María Victoria Alconchel, presidenta del Colegio, recordó que el 17 de junio de 2004, un centenar de estudiantes de arquitectura, docentes y representantes de diversas organizaciones realizaron un abrazo simbólico al Correo alertados por su visible deterioro. “Este reclamo lleva hace muchos años. Hoy la situación es diferente y muchos estudios no llegaron a buen puerto para poner en valor el edificio”, mencionó.
“Al cumplirse 20 años de aquel hecho proponemos un nuevo abrazo al edificio, que hoy está protegido por la Ordenanza N° 12784 en el catálogo de bienes del Patrimonio Urbano Arquitectónico de la ciudad, es decir, con obligación de conservación integral”, agregó Alconchel.
A su vez, detalló cómo se encuentra actualmente el histórico inmueble. “El edificio tiene una situación muy preocupante y problemas severos muy visibles en su estado general. Hay muchos desprendimientos y tiene comprometido parte de sus instalaciones lo que no permite su uso parcial”, describió la arquitecta.
El edificio del Correo, proyectado hace 65 años por los arquitectos Spencer y Finkbeiner, es uno de los exponentes más valiosos de la arquitectura moderna santafesina además de estar ubicado en una zona estratégica de la capital provincial. Sin embargo, vemos con preocupación su estado parcial de abandono debido a una gran cantidad de patologías derivadas de la falta de mantenimiento y de los cambios de uso, que reclaman acciones inminentes.