Las fuertes lluvias y los vientos derribaron el viernes un techo en el principal aeropuerto de Nueva Delhi, matando a una persona e interrumpiendo los vuelos desde una terminal nacional, mientras que las calles inundadas y los embotellamientos de tráfico alteraron la vida cotidiana en la capital de la India.
Según la oficina meteorológica de la India, en la zona del aeropuerto cayeron unos 148,5 milímetros de lluvia en tres horas a primera hora de la mañana, más que el promedio de todo junio.