Cristian Russo, ingeniero agrónomo de la Bolsa de Comercio de Rosario, conversó con Canal E, reveló algunos de los desafíos que combate el sector agrónomo y con optimismo compartió que había grandes pronósticos para la siembra de trigo que se mantienen pese a estos.
Gracias a las lluvias de marzo y abril que, si bien retrasaron la cosecha, también produjeron una siembra significativa que hoy se estima en 6.7 millones de hectáreas, el 90% de lo pronosticado por Russo quien contemplaba más de 7 millones de hectáreas.
Desafíos en el sector agrónomo
Entre los desafíos, Russo también mencionó el problema de la chicharrita que afecta al maíz tardío y ha impactado especialmente en el centro y norte del país. Un escenario que obligó a muchos agricultores a adoptar el trigo por necesidad financiera, y agregó: “este frío puede ser beneficioso para reducir su presencia, que fue tan problemática restándole un 22% de producción”.
Ya en el área del transporte destacó que si bien los números no son tan diferentes de los promedios, con el problema del maíz que es un cultivo caro de producir los agricultores se arriesgaron a la incertidumbre durante el año pasado. Esto se vio trasladado en la financiación, que facilitó una siembra récord y una fertilización adecuada para una gran campaña este año.
Russo también comentó que la liquidación de la cosecha vive un “desajuste” entre los precios externos e internos y aseguró que, mediante imágenes satelitales, se observó que el año pasado se sembró un 30% más de maíz, como una estrategia para combatir la incertidumbre económica.
El panorama futuro del sector
Eduardo Vázquez, consultor agrícola argentino, comparte una opinión también repleta de desafíos con respecto a la campaña de trigo para el 2024/25 que podría comenzar con un stock elevado en un contexto internacional con tendencia bajista para los precios del cereal.
Además, se estima una cosecha argentina de trigo de 19,29 millones de toneladas con existencias iniciales por 3,39 millones, lo que daría una oferta total de 22,6 millones, la segunda más elevada del último lustro. Algo no muy favorable para los productores argentinos al considerar el escaso nivel de ventas anticipadas del cereal.
Hasta el 3 de julio, los exportadores argentinos habían adquirido 2,23 millones de toneladas de trigo 2024/25, de las cuales 478.800 toneladas tenían precio abierto en operaciones “a fijar”. Mientras, en el mercado de futuros argentino Matba Rofex, mantiene el interés abierto para el ciclo 2024/25 y suma 672.600 toneladas.
A pesar de un período de cosecha potencialmente complicado, el trigo argentino podría recuperarse en 2025, donde la consultora StoneX prevé una producción de 7,78 millones en Brasil debido a desastres climáticos que sugieren una posible necesidad de importación del trigo argentino bajo el acuerdo del Mercosur.