De acuerdo con la Organización Meteorológica Mundial (OMM), este año se produciría una transición hacia La Niña, que llegaría en la primavera, afectando al Litoral y la región con lluvias por debajo de lo normal. Frente a esta probabilidad, los ministerios de Ambiente y Cambio Climático y de Gobierno convocaron, durante esta semana que pasó, reuniones con autoridades de toda la provincia con el fin de coordinar el manejo del fuego.
El ministro de Ambiente y Cambio Climático, Enrique Estévez, explicó que “para nosotros la articulación con los gobiernos locales es fundamental, porque cada uno tiene algo para aportar en la construcción de protocolos para prevenir y en el accionar de manera coordinada frente a incidentes como los que ya hemos vivido y que estamos comenzando a vivir en estos días. Por eso es importante reforzar el vínculo y la coordinación para hacer frente al incremento de riesgos de posibles incendios”.
Por su parte, Marcos Escajadillo, secretario de Protección Civil, dependiente del Ministerio de Gobierno, destacó que “hay una decisión muy fuerte por parte de Maximiliano Pullaro y de todo el gabinete de trabajar este tema con cercanía, estando presente antes de que suceda algo. Los jefes comunales y los intendentes, además, tienen un capital único: son quienes mejor conocen el territorio. Y entendemos que el momento es ahora, porque si no hay una organización previa, aunque tengamos toda la voluntad del mundo, la situación puede volverse más crítica”.
En este sentido, Provincia mantuvo encuentros de trabajo cada uno de los días de esta semana en las ciudades Avellaneda, Santa Fe, Rafaela, Ceres, Firmat y Rosario con autoridades de todos los departamentos. En dichos encuentros se contextualizó sobre el estado de situación general de la provincia, mientras que los locales pudieron exponer las singularidades de su territorio y sus recursos, además de transmitir la experiencias ya vividas frente a este tipo de fenómenos. A partir de esta información recolectada, la Secretaría de Protección Civil elabora un inventario y mapeo de estas herramientas para mejorar la detección de alertas y poder abordar los incidentes con mayor velocidad y contundencia.
Con Entre Ríos
Atendiendo a las mismas razones, las autoridades santafesinas ya están coordinando acciones junto con autoridades del Gobierno de Entre Ríos que tienen como prioridad el control del fuego y el cuidado y la preservación de las islas del Delta y de las áreas que puedan verse afectadas.
La madrugada del jueves, desde las costas de Arroyo Seco se pudo visibilizar un incendio en la zona de las islas. Ante tal evento, las fuerzas de seguridad activaron el protocolo de coordinación, siendo la parte santafesina la que corroboró la denuncia recibida y las fuerzas de Entre Ríos las que se acercaron hasta el lugar de los hechos para asegurarse de la extinción del fuego. El mismo fue controlado con éxito.
Capacitación de brigadistas
En otro orden, la Secretaría de Biodiversidad del Ministerio de Ambiente y Cambio Climático, junto a la de Protección Civil, están llevando adelante la capacitación en incendios forestales a 120 brigadistas de toda la provincia.
Esta instrucción, de formato intensivo, reúne a los brigadistas durante 3 días consecutivos con el fin de adquirir el conocimiento teórico y técnico necesario al momento de abordar un incendio forestal. A mediados de Julio se realizó el encuentro en la ciudad de San Jorge y, durante el mes de agosto, se llevarán a cabo en Romang, Melincué y Villa Constitución.
Centro de Monitoreo y faros de conservación
El Ministerio de Ambiente y Cambio Climático administra el Centro de Monitoreo (ubicado en Sede Ribera, Rosario) que emite alertas tempranas de incendio a partir de las imágenes que captan los faros de conservación que el gobierno nacional tiene en Villa Constitución, Puente Rosario-Victoria, Victoria, Diamante, Puerto Gaboto y Túnel Subfluvial. Desde esta base se puede detectar la dimensión y ubicación de los principios de incendios que suceden hasta 50 km de distancia.
Desde comienzos del corriente año existe un protocolo de acción que involucra a distintas áreas del gobierno para mejorar los tiempos de reacción ante eventos de este tipo.