El Gobierno argentino se encuentra a la espera de anuncios importantes en el sector tecnológico, con proyecciones de inversiones que podrían alcanzar los US$ 1.000 millones. Estas expectativas surgen tras la reciente visita del presidente Javier Milei a Silicon Valley, donde mantuvo reuniones con gigantes tecnológicos como Apple, Meta, Alphabet y OpenAI.
Demian Reidel, jefe de asesores de la presidencia, está a cargo de coordinar las políticas necesarias para atraer y consolidar estas inversiones. Reidel destacó la importancia de establecer un entorno favorable para que empresas de la magnitud de Apple operen en Argentina y enfatizó el objetivo de convertir al país en un polo global de innovación tecnológica.
La implementación del régimen RIGI, destinado a grandes inversiones, es una de las medidas que se prevé fortalecerá el ambiente de inversión a largo plazo, generando estabilidad y atractivo para los inversores internacionales.
Además de las inversiones en tecnología, el presidente Milei ha confirmado avances en conversaciones con Meta para desarrollar programas educativos basados en inteligencia artificial y con Alphabet para mejorar la eficiencia burocrática estatal a través de soluciones en la nube.
En el ámbito de los smartphones, Argentina también está viviendo un cambio significativo. El grupo local BGH ha cerrado una alianza estratégica con el gigante chino Transsion, uno de los mayores fabricantes mundiales de teléfonos móviles. Transsion, conocido por su marca TECNO Mobile, ha visto un aumento del 215% en sus ventas en América Latina durante el primer trimestre de 2024, a pesar de una caída global en el mercado.
La nueva colaboración permitirá a BGH fabricar y distribuir los teléfonos TECNO en Argentina, con la producción llevada a cabo en la planta de BGH en Río Grande, Tierra del Fuego. Transsion, con sede en Shenzhen y un enfoque en equipos de gama media y baja, introducirá dos modelos de la serie Spark en el mercado argentino, disponibles tanto en tiendas físicas como en línea.
Este acuerdo representa un paso significativo para el mercado local de smartphones, que ha experimentado un crecimiento del 26% interanual en América Latina, a contracorriente de la tendencia global de declive.