En Argentina, los precios de las notebooks superan en un 70% a los de Brasil, Chile y Colombia, mientras que los celulares son un 60% más caros. Esta diferencia significativa en los precios frena la inversión en tecnología y limita el acceso a los últimos avances en aplicaciones y software.
El sector de informática y telecomunicaciones en Argentina ha visto una caída en ventas de hasta el 60% durante este año. Las altas cifras de impuestos y aranceles juegan un papel crucial en esta disparidad de precios. La carga impositiva sobre la electrónica en el país alcanza el 66%, lo que incluye un arancel de importación del 16%, IVA del 10.5%, un IVA adicional del 10%, y otros impuestos.
En comparación, Brasil tiene una carga impositiva del 55%, Chile aplica un 26.1%, y Colombia un 19%. Estos niveles más bajos de impuestos en los países vecinos permiten precios más competitivos para tecnología.
El ministro de Economía, Luis Caputo, ha propuesto reducir el impuesto PAIS del 17.5% al 7.5% como una medida para bajar los precios y estimular el consumo. Sin embargo, no se prevé un cambio en el arancel del 16%.
La Cámara de Distribuidores Mayoristas de Informática, Productores y Afines (Cadmipya) reporta que las ventas de productos informáticos, como notebooks y celulares, cayeron un 58% en los primeros seis meses del año en comparación con el mismo período de 2023. Las ventas en este sector se redujeron a US$ 220 millones, frente a los US$ 525 millones del año anterior.
Además, el informe del sector privado muestra que las ventas minoristas de electrodomésticos en Argentina también disminuyeron un 33% en el primer semestre de 2024. Esta caída en las ventas refleja el impacto de los altos precios en la capacidad de compra de los consumidores y subraya la necesidad urgente de reformas fiscales para revitalizar el sector tecnológico en el país.