El ex presidente de Uruguay José “Pepe” Mujica recibió el alta este martes, luego de haber pasado varias horas internado por una deshidratación, como consecuencia de la radioterapia que recibió por el cáncer que padece en el esófago.
Mujica, de 89 años, había ingresado el lunes en el centro de salud del Centro Asistencial del Sindicato Médico del Uruguay (Casmu), en Montevideo, donde pasó la noche y le hicieron una serie de estudios.
La radioterapia a la que fue sometido provocó que “empeorara la función renal”, dijo su médica personal, Raquel Pannone.
En declaraciones a la prensa, la facultativa admitió que la salud de Mujica es “frágil” y añadió que “se le hicieron varias tomografías y muestran que no hay evidencia del tumor, pero lo que sí tiene es una fibrosis que queda en el esófago”.
“Es como una quemadura, entonces tenemos que lograr que el tejido se recupere. A los 90 años todo es más lento”, explicó la médica. “No aparece evidencia de que tenga tumor y no aparece tampoco en ningún otro territorio”, remarcó.
“No tenemos muchas posibilidades de otras complicaciones porque le venimos haciendo estudios casi todos los días y el resto está bien”, concluyó.
Además, Pannone reiteró que “a su edad se pierde la fuerza más rápido pero se recupera más lentamente”.
Recientemente, y en una entrevista con el periódico estadounidense The New York Times publicada la semana pasada, el ex mandatario confió que se sentía “desecho” por el tratamiento.
El 29 de abril, en conferencia de prensa, el propio Mujica anunció que padecía cáncer de esófago, pero no pareció amedrentado por la noticia.
Con su estilo inconfundible, según el análisis del sitio Sputnik News, declaró: “En mi vida, más de una vez anduvo la Parca rondando el catre, pero me siguió pastoreando todos estos años. Por obvias razones, esta vez creo que viene con la guadaña en ristre”.