Las encuestas revelan que más de la mitad de quienes se consideraban clase media ahora se sienten pobres. Este cambio refleja un proceso de movilidad social descendente.
Un estudio de Opinion Lab indica que el 36% se identifica como clase baja, un aumento significativo respecto al 18% del año pasado. La percepción de clase media también cayó, mientras que quienes se consideran de clase alta disminuyeron al 4%.
El consultor Javier Pianta señala que la falta de recuperación del poder adquisitivo impacta el desempeño electoral. La opinión pública se construye sobre resultados socioeconómicos, que actualmente son negativos.
El 43% de los que se veían como clase media en 2023 sienten que descendieron un escalón. Además, el 20% cree que cayeron dos peldaños hasta la clase baja.
Las encuestas de Haime & Asociados confirman que la autopercepción de clase alta cayó 1,3 puntos. La clase media disminuyó en 10,4 puntos, mientras que la clase baja creció casi 17 puntos.
Este patrón de deterioro socioeconómico se agrava en un contexto ya desfavorable. Casi la mitad de las familias apenas cubren sus gastos con ingresos actuales.
La encuesta de Proyección Consultores indica que el 32% no llega a fin de mes. Al sumar quienes deben reducir gastos, el porcentaje asciende a casi 68%.
La percepción sobre las medidas del gobierno es negativa. Más de la mitad de los encuestados no cree que estas medidas sirvan para mejorar la situación económica.