Cada 8 de septiembre, se celebra el Día Internacional de la Alfabetización. Sin embargo, hoy destacamos un fenómeno astronómico relevante: la Luna se aleja de la Tierra a una velocidad de aproximadamente 3,82 centímetros por año. Este proceso, aunque imperceptible, tiene implicaciones a largo plazo.
La fricción entre océanos y superficie terrestre
La fricción entre la superficie terrestre y los océanos desacelera gradualmente la rotación de la Tierra, provocando que la Luna se aleje a un ritmo constante. Este fenómeno natural comenzó con la formación de nuestro planeta y continuará a lo largo de millones de años.
Una visión futura: la Luna podría desaparecer de la vista
Sarah Romero, periodista científica de la revista *Muy Interesante*, estima que la Luna podría dejar de ser visible a simple vista en aproximadamente 50.000 millones de años, si el ritmo de alejamiento se mantiene constante.
Impacto en los ritmos biológicos y astrales
La desaceleración de la rotación terrestre podría cambiar la duración del día, afectando los ritmos circadianos de humanos y otras especies. Este ajuste podría ser necesario si los días se alargan a 25 horas.
Fases de la Luna y su influencia
Las fases de la Luna—Luna Nueva, Luna Creciente, Luna Llena y Luna Menguante—han influido en rituales y prácticas desde tiempos antiguos. Cada fase se asocia con diferentes energías y rituales:
- Luna Nueva: Establecimiento de intenciones y reflexión interna.
- Luna Creciente: Protección del hogar mediante la purificación del espacio personal.
- Luna Llena: Potenciación de gemas y piedras bajo la luz lunar.
- Luna Menguante: Limpieza física y emocional con agua y sal.
Eventos astronómicos recientes y futuros
Este 27 de agosto, la Luna, Júpiter y Marte se alinearon en una “conjunción astronómica”, formando un triángulo cósmico visible en varias partes del mundo. Además, el 2 de octubre se producirá un eclipse anular del Sol, cubriendo hasta un 70% del astro en su máximo punto, especialmente visible en Santa Cruz, Argentina.
Consideraciones internacionales sobre la Luna
A pesar de su importancia y el interés en la exploración lunar, ningún país puede reclamar la propiedad de la Luna. El Tratado del Espacio Exterior de 1967 establece que la Luna es patrimonio común de la humanidad y que cualquier exploración debe beneficiar a todas las naciones.