El abogado de Leonardo Cositorto, el líder de Generación Zoe acusado por una presunta
estafa piramidal, Guillermo Dragotto, solicitó hoy que se suspenda el primer juicio que se lleva a cabo en la ciudad correntina de Goya, pero la Justicia lo rechazó.
Dragotto, que también defiende a Marcelo Batista, fundamentó ante el Tribunal que ambos detenidos ya fueron condenados por la sociedad y aseguró que las empresas eran lícitas y estaban registradas, mientras que se realizaban capacitaciones.
En este sentido, el defensor consideró que sus clientes invirtieron millones de dólares en Generación Zoe: “Nadie que quiera estafar invierte en decenas de empresas, como gimnasios,
escuelas, universidades, y otras tantas, como lo hizo Generación Zoe”.
Según afirmó el letrado, los aportantes firmaron un fideicomiso y tenían pleno conocimiento de los riesgos de invertir su dinero en la compañía y ganar intereses mucho mayores a brinda un banco. “No fueron estafados porque aceptaron las reglas del contrato”, añadió Dragotto en sus alegatos.
En último término, el profesional señaló que la caída de Generación Zoe no ocurrió porque se trató de una estafa piramidal sino que fue a raíz de que la fiscal de Instrucción de Villa
María, Juliana Companys, no solo pidió las capturas internacionales de los implicados, sino que con sus dos denuncias se inhibieron los bienes y se bloquearon sus cuentas.
Por su parte, el abogado de Nicolás Ismael Medina y Javier Sebastián Medina, Joaquín Romero, peticionó la absolución de sus defendidos al sostener: “Iban a la oficina de Generación Zoe de
Goya pero no eran responsables de ella”.
Los fiscales Juan Carlos Castillo y Rubén Barry consideraron que la organización operaba en Goya entre mayo de 2021 y febrero de 2022 con “fines defraudatorios”.
De acuerdo a los funcionarios el Ministerio Público Fiscal de Corrientes, Cositorto, Batista y Echegaray “aparentaban ser poseedores de bienes, negocios y empresas”, mientras que los demás integrantes (Camelino y ambos Medina) “mostraban un cambio laboral favorable radical de vida en un corto lapso, que les proporcionaba, un nivel de vida desconocido con anterioridad a su incorporación a la asociación criminal”.
La logística consistía en persuadir y captar inversores, los cuales luego serían damnificados, mediante eventos gratuitos de marketing digital (por Facebook, Instagram, Twitter, WhatsApp,
Telegram, Zoom).
Para la fiscalía Cositorto era “el principal protagonista en el diseño y motorización de la estructura”.
Andrés Buffil, abogado de Miguel Ángel Echegaray y Lucas Damián Camelino, reiteró que ambos son inocentes: “Lucas y Miguel formaron parte de una estructura de negocios lícitas, vamos a
demostrar con la prueba documental, constancia de inscripción en Personas Juridicas, AFIP, Dirección Provincial de Rentas”.
Cositorto, que fue trasladado el lunes desde el penal de Bouwer en Córdoba a Corrientes, declarará frente a los jueces el viernes a partir de las 8:30.
El líder de Generación Zoe, Batista y Miguel Ángel Echegaray serán juzgados por supuesta asociación ilícita en carácter de organizadores y estafa en modalidad de de delito continuado en
concurso real en calidad de coautores.
En tanto, Lucas Daniel Camelino, Nicolás Ismael Medina y Javier Sebastián Medina están acusados por el mismo ilícito, pero en carácter de miembros.
Las audiencias se realizan en la sala del Tribunal de Juicio de Goya, ubicado en la calle Ejército Argentino 550, Goya, al tiempo que la sentencia se conocerá el 11 de diciembre.