La Administración Nacional de Seguridad del Tráfico en los Caminos (NHTSA) anunció que investigará los sistemas de conducción autónoma de Tesla. Esta evaluación incluirá más de 2,4 millones de vehículos fabricados entre 2016 y 2024.
La medida representa un riesgo para el modelo de negocio de Tesla. Un resultado negativo podría llevar al retiro de estos vehículos del mercado. La investigación se origina a partir de cuatro informes de accidentes relacionados con el software de “conducción autónoma total”.
La NHTSA indicó que los accidentes ocurrieron en condiciones de visibilidad reducida, como niebla o reflejos del sol. Uno de los incidentes involucró a un Tesla que atropelló y mató a un peatón.
La evaluación busca determinar si los sistemas de Tesla pueden detectar y responder adecuadamente a situaciones de baja visibilidad. También examinará si otros accidentes ocurrieron en condiciones similares.
La NHTSA destacó que la conducción autónoma total es en realidad un “sistema de automatización de conducción parcial”. Este anuncio se produce una semana después del lanzamiento del Cybercab por Elon Musk en Burbank, California.
Musk afirmó que su concepto de “robotaxi” funcionará sin pedales ni volante y estará en el mercado en 2027. Sin embargo, analistas e inversores no mostraron gran entusiasmo.
Desde el lanzamiento del Cybercab, las acciones de Tesla bajaron un 8%. Las acciones se mantuvieron estables después del aviso de la NHTSA.
A diferencia de Waymo, los sistemas autónomos de Tesla dependen en gran medida de cámaras e inteligencia artificial. Este enfoque resulta más económico que implementar sensores avanzados como Lidar y radar, utilizados por Waymo.18