Milán, la capital económica de Italia, prohibió fumar en sus calles y espacios públicos, según una norma legal que entró en vigor el primer minuto de 2025.
Existe una salvedad: si hay por lo menos diez metros entre el humo de tabaco y los transeúntes, según especifica un informe del sitio RFI. Quien fume y afecte al prójimo se expone a multas de entre 40 y 240 euros, de acuerdo con la medida del gobierno municipal de la ciudad de Milán.
El objetivo declarado es limpiar el aire pero la disposición suscitó las protestas de comerciantes, restaurantes, obviamente las empresas de tabaco y quienes dicen que pipas y cigarros no son la verdadera causa de la contaminación.