En un nuevo aniversario de la Gesta de Malvinas, el reconocimiento tuvo lugar esta mañana sede del Centro de Excombatientes, ubicado en Pedro Vittori al 4200. Antonio Mildenberger y Luis Borgonovo, veteranos de guerra, compartieron sus experiencias, marcadas por el sacrificio, la lucha por el reconocimiento y el recuerdo de quienes no volvieron.
El silencio y la necesidad de hablar
Antonio Mildenberger, excombatiente de la ciudad de Santa Fe, relató cómo el conflicto marcó un antes y un después en su vida. Durante muchos años, evitó hablar del tema, como muchos de sus compañeros, debido a la falta de contención y el rechazo social inicial.
“Nos barrieron debajo de la alfombra”, recuerda. Mildenberger mencionó que en los primeros 30 años “poco y nada” se hizo por los veteranos. Recién en las últimas décadas comenzaron a recibir apoyo en materia de salud y pensiones.
Destacó que en la provincia de Santa Fe han logrado importantes beneficios, como dos obras sociales y una legislación que permite la jubilación anticipada para los excombatientes con 25 años de aporte.
ARA General Belgrano
Luis Borgonovo, otro veterano presente en el evento, revivió con emoción el hundimiento del ARA General Belgrano. “Estaba recordando dónde me había bajado en el momento del hundimiento, dónde estaba mi balsa”, expresó. Su relato es un testimonio de la tragedia que costó la vida de 323 argentinos y que sigue siendo un símbolo del sacrificio en Malvinas.
Mildenberger también recordó a los compañeros que no regresaron. Uno de los momentos más conmovedores que vivió fue cuando conoció a la madre de un amigo desaparecido en el hundimiento del ARA General Belgrano. “Me pegó una cachetada cariñosa y me dijo: ‘A vos te quería conocer’.”
A 43 años de la guerra, los veteranos siguen luchando para que su historia sea contada y valorada. “Nosotros somos historia viva”, afirma Mildenberger.