Según un informe, un mayor nivel educativo de los padres se asocia con mayores aprendizajes de los estudiantes en la escuela.
Esa correlación, señalada tradicionalmente por la investigación educativa internacional, se verifica en Argentina al observar los resultados de la prueba Aprender de primaria. Allí, los alumnos cuyos padres terminaron la secundaria superan –en promedio– el nivel “satisfactorio” en Lengua, mientras que la media de los estudiantes cuyos padres no completaron la escuela secundaria (o lograron niveles educativos inferiores) se ubica por debajo del nivel satisfactorio.
Los datos surgen del informe “¿Qué relación hay entre el nivel educativo de los padres y los resultados de aprendizaje?”, del Observatorio Argentinos por la Educación, que indagó la relación entre el máximo nivel educativo alcanzado por padre o madre y el nivel de desempeño de los estudiantes en la prueba Aprender 2016 de 6° grado de primaria.
El análisis arroja que, tanto en Lengua como en Matemática, los alumnos cuyos padres terminaron la secundaria logran mejores aprendizajes que aquellos cuyos padres tienen menor nivel educativo.
En Matemática, se observan pocas diferencias de desempeño entre los estudiantes que pertenecen a familias con secundaria incompleta, primaria completa y primaria incompleta.
“Se sabe a nivel mundial que los niveles de aprendizaje están muy condicionados por el nivel educativo de la madre o los padres. Esta variable afecta las experiencias educativas y hasta nutricionales de los niños antes de empezar la escuela, afecta la elección de la propia escuela a la que van a asistir, y los aprendizajes alcanzados –plantea Paula Razquin, profesora e investigadora de la Universidad de San Andrés–. Dadas estas condiciones, lo que sucede en la escuela y cómo esta se articula con las familias tiene gran relevancia, para compensar esos condicionantes previos de los que los chicos no son responsables”.
El documento explica que se definió trabajar con el “máximo nivel educativo alcanzado” porque en el 76,1% de los casos los padres tienen un nivel educativo similar.
Ignacio Ibarzábal, director ejecutivo del Observatorio Argentinos por la Educación, afirma: “Estos datos señalan el enorme desafío que tiene el sistema educativo argentino para lograr una mayor equidad en los aprendizajes y compensar las múltiples desigualdades de origen de los estudiantes”.