Fenómenos Paranormales Un exitoso programa en el Uruguay se ocupó de tratar este enigmático caso, en versión cortometraje. Para entendidos.
La historia es por demás conocida. Es más, se podría decir, sin temor a fallar demasiado en la apreciación, que representa una de las leyendas más comentadas y de más repercusión y que, a la vez, se encuadra entre las más enigmáticas de la Buenos Aires de antaño.
Es que en pleno barrio porteño de Balvanera, en Riobamba 144, a menos de tres cuadras del Congreso nacional, hay una oscura casona que destaca entre la urbanidad clásica de la zona, por la particularidad de su fachada y más aún por la enorme palmera que, en el patio externo, atenta con ocultar la vivienda. Y aunque en ese ahora oscuro solar porteño, desde hace años han funcionado diferentes emprendimientos comerciales, lo que hace a la tremenda historia se relaciona con el pasado lejano, dado que allí vivió Elisa Galcerán junto a sus cinco hermanos.
Y esa es la historia que “Voces Anónimas” el reconocido programa televisivo que en Uruguay relata leyendas urbanas del mundo, ya con seis temporadas en el aire en la TV abierta tomó para una adaptación libre de la extraña sucesión de hechos, a modo de episodios que se dice que sucedió en esa casona. Todo, en apenas unos pocos minutos.
Relatos
Una mujer, Elisa, extremadamente autoritaria y religiosa, que tenía la excéntrica costumbre de cerrar los cuartos de los fallecidos dos con llave, a modo de dejarlos tal cual lo habían abandonado al momento de su muerte.
Esto no sería tan extraño, a no ser de que cada uno de sus cinco hermanos, quienes no tenían una buena relación con su hermana, fueron muriendo en diferentes accidentes, con distancias de tragedia absurdas, como semanas o meses.
Este relato, archiconocido, hizo que quedara Elisa sola y en una mansión cerrada, donde los muertos tenían más espacio que su único integrante, aún con vida. Desde este espacio, se ha relatado más de una vez esta verdadera leyenda urbana…
Versión propia
El creador del programa “Voces anónimas”, el reconocido investigador uruguayo Guillermo Lockhart, a partir de este rico relato hasta nuestros días.
Lo interesante es que, además del programa del TV oriental, el cortometraje se puede ver en el canal del director en YouTube, ingresando al sitio Estados aterrados. que obviamente ha trascendido las fronteras de nuestro país, justamente invitó al joven director argentino Mariano Cattáneo, un especialista en estos temas del género, a reconstruir con la historia de la casa de la Palmera, un cortometraje que ilustre alguna de las tantas anécdotas que circulan por los distintos propietarios, inquilinos y visitantes que pasaron por la añosa y enigmática propiedad.
Y la leyenda, en versión libre, da espacio para que cada uno de quienes lo observen, puedan sacar sus propias conclusiones. Entonces, el director, tras repasar en detalle cada uno de los diferentes relatos, pintó en escasos minutos un verdadero semblante de un hecho que tiene visos de haber sido cierto, y que luego fue ganado por la leyenda, que sigue en pie hasta nuestros días.