Los agricultores ya analizan tomar medidas drásticas para el siguiente ciclo, de acuerdo a lo que está pasando esta campaña.
Los productores chaqueños que apostaron por el girasol fortalecen la idea de no implantar este cultivo para la próxima campaña, como una reacción por el abuso que nos hacen en el precio y porque no hay un llamado a conciliar partes por parte de un Estado ausente, indicaron.
La provincia de Chaco implantó una superficie de 468.000 hectáreas en este ciclo, pero la situación para el productor tuvo muchas trabas, en primer lugar, por las cartas de porte, relacionado a la aplicación del SISA, instancia que luego fue resuelta, aunque el gran problema es el mercado.
Esto último fue advertido al gobierno del Chaco y a sus legisladores nacionales a los fines de persuadir al gobierno nacional que de continuar con este tipo de abusos por parte de los grandes acopiadores, como consecuencia de la falta de controles por parte del Estado nacional. De esta forma, habrá impactos muy fuertes en la rentabilidad del productor.
“La situación del girasol es caótica”, señaló el productor Cristian Molnar, señalando que a la par de la falta de precios competitivos “estamos con rindes muy bajos”.
“Me parece que con esta situación el productor no cubre los costos. Encima mucho girasol y por ende el precio lo van a tirar para abajo” señaló Javier Druzianich, dirigente de Federación Agraria Argentina. También indicó que “el productor no puede entregar y esperar mucho tiempo para liquidar así como están los números, hoy no se completa ya sea máquina o insumos o cualquier otro gasto”, agregó.
“En junio, cuando nos incentiven a sembrar con buen precio, se van a llevar una sorpresa, porque así no se puede sembrar girasol”, apuntó Roberto Polich, de la filial agraria de La Tigra. “Hoy, por más que la AFIP le habilite a vender con los precios que tiene, no va a cubrir los costos “, dicen los productores de diferentes puntos de la provincia que expusieron con crudeza el cuadro de situación que se vive.
Fuente: Agritotal