La Cámara de Diputados aprobó en general, y giró al Senado, el proyecto para agravar las penas a los barrabravas que cometan actos de violencia en los estadios de fútbol.
En horas de la noche de este martes, la votación arrojó un total de 201 votos afirmativos y 3 abstenciones, luego de unas siete horas de debate parlamentario.
En la sesión, los principales argumentos planteados por el FPV giraron en torno a que los funcionarios e integrantes del Poder Judicial no puedan ser a su vez dirigentes de clubes profesionales o integrantes de asociaciones. Asimismo, esa idea contó con el respaldo de Elisa Carrió y la Coalición Cívica.
Por el lado de Cambiemos, el bloque aceptó modificaciones sobre la discusión para sumar los votos de la oposición.
La iniciativa busca terminar con la violencia en el fútbol, por medio del agravamiento de las penas, la creación de nuevos delitos que antes eran contravenciones y apunta a cortar las fuentes de financiamiento de los grupos violentos que viven del negocio de este deporte.
Su aprobación final quedará para el 2019, ya que la Cámara de Senadores decidió postergar hasta febrero próximo su tratamiento -también el de financiamiento de los partidos políticos-, por falta de acuerdo entre los distintos bloques políticos.