Como sucediera en Rusia 2018, el seleccionado nipón dejó el vestuario impecable y un mensaje en tres idiomas, japonés, árabe e inglés: “Gracias”.
Se convirtió en una costumbre, pero no por eso deja de ser destacable. Nuevamente en un certamen internacional, la Selección de Japón dejó una nueva lección de respeto al limpiar el vestuario tras perder la final ante Qatar.
Tal como hiciera en Rusia 2018, el plantel dejó el vestuario impoluto y con un mensaje de agradecimiento. En este caso, escrito tanto en árabe, como en japonés y en inglés. “Gracias”.