Es el costo de la canasta básica para una familia santafesina. La inflación en alimentos no se detiene y se duplicó en un año. Precios de supermercados duplicaron a los de enero de 2018.
Cada vez menos personas llegan a cubrir la canasta básica y eso se traduce en un aumento imparable de la pobreza. En enero, Santa Fe tuvo el doble de inflación en supermercados que hace un año, fenómeno que obligó a que una familia necesite casi 13 mil pesos para no caer en la indigencia.
Los insumos de primera necesidad registraron una de las subas más importantes en el último registro del Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec). En el podio de los aumentos se encontraron productos que influyen directamente sobre la canasta básica. A pesar de que el presidente Mauricio Macri confió en una merma progresiva del proceso inflacionario, el Indec arrojó otra realidad. El 2,9% de enero y el 49,3% acumulado se traducen en un piso cada vez más alto para cubrir necesidades básicas.
Efecto en Santa Fe
Según un informe del Centro de Estudios Scalabrini Ortiz (Ceso), una familia necesitó 12.825 pesos para no caer en la indigencia. La suba imparable de precios provocó que ese parámetro se ubique cada vez más arriba. A mayores aumentos, mayor dificultad de llegar a cubrir la canasta, y cada vez más familias bajo la línea de indigencia.
En supermercados de la provincia la inflación de enero fue del 5,72%. Esta cifra duplicó a la de enero 2018 y complicó aún más las posibilidades de cubrir insumos básicos. El sector arrancó este año con importantes aumentos en productos indispensables. Frutas y verduras (10,4%), Carnes (9,28%) y lácteos (8,07%) se ubicaron en las primeras posiciones, y no hubo rubros con descensos promedio de precios.
Pese al dólar quieto
Desde Ceso advirtieron que esa tendencia alcista se mantiene a pesar de que “el tipo de cambio se ha mantenido durante los últimos cuatro meses”. Y confirmaron que “la inercia inflacionaria continúa marcando el ritmo de aumentos de precios en supermercados santafesinos”. Si analizamos el acumulado de los últimos doce meses, la inflación en supermercados de la región superó el 72%.
Teniendo en cuenta que restan aumentos en tarifas, transportes y servicios, difícilmente pueda haber una merma inflacionaria en el corto plazo. De manera que el impacto sobre alimentos será inevitable y el número de la canasta básica seguirá trepando. A su vez, el piso para no caer en la indigencia será cada vez más alto y difícil de alcanzar para los que menos tienen.
Alimentos en el podio
El 2,9% de inflación en enero aportó al 49,3% acumulado en los últimos doce meses y significó una escalada de precios más alta que la de diciembre. Esto impacta directo en comercios de todo el país y echa por tierra la hipótesis oficialista de que la inflación está bajando.
Los incrementos más importantes que anunció el Indec, se dieron en alimentos y bebidas, núcleo de la canasta básica, y que se reflejó en el caso de Santa fe. El resultado en ese rubro arrojó un aumento del 3,4% en enero, y 53% en los últimos doce meses.