Debuta en Delray Beach ante el japonés Yoshihito Nishioka, en su regreso tras la fractura de rótula que sufrió en octubre.
Pasaron 131 días desde la última vez que Juan Martín Del Potro disputó un partido del circuito profesional. Fue el 11 de octubre del año pasado, cuando enfrentó al croata Borna Coric por los octavos de final del Masters 1000 de Shanghai.
Había perdido 7-5 el primer set y mientras disputaba el primer game del segundo parcial, se resbaló y su rodilla derecha impactó de lleno contra el suelo. Se retiró por el dolor agudo, aunque por entonces no imaginaba que pasaría cuatro meses parado para recuperarse de la fractura de rótula. Hoy regresará en el ATP 250 de Delray Beach.
En el último turno de la cancha central, no antes de las 22 de la Argentina (por DirecTV Sports), Del Potro enfrentará al japonés Yoshihito Nishioka, de 23 años, 72° del ranking mundial. No hay antecedentes entre ambos.
“Pensé en cosas horribles. Pensé que estaba al final de mi vida. Tengo una fractura en la rodilla que nunca esperé tener”, señaló Del Potro en declaraciones publicadas en el sitio oficial de la ATP. “Después de pasar días malos, empecé a confiar en mis médicos de nuevo sobre que jugaría al tenis pronto y creo que estoy en el buen camino otra vez para ser competitivo”, añadió.
“Después de cuatro meses, voy a jugar un torneo, lo cual indica que ha sido una buena recuperación. Pero sé lo difícil que es estar preparado para jugar en los grandes torneos y mantenerse en las primeras posiciones del ranking, y lo sé porque ya lo padecí en el pasado. Pero esta es mi vida y sé cómo tengo que manejar estos problemas”, concluyó.
Los otros favoritos del torneo son los estadounidenses John Isner, Frances Tiafoe (último campeón del certamen) y Steve Johnson.
El de Delray Beach es un torneo especial para el tandilense. Allí cortó con una racha de casi 17 meses -531 días, exactamente- entre el título del Abierto de Estados Unidos 2009 y su única consagración en esta ciudad balneario, en 2011, cuando venció al serbio Janko Tipsarevic por un doble 6-4. En el medio pasó una cirugía en su muñeca derecha, que lo tuvo inactivo durante ocho meses.
Cinco años más tarde, luego de los numerosos dolores de cabeza provocados por su muñeca izquierda, de la que fue tres veces operado, regresó a las canchas tras casi un año justamente en Delray Beach. Entonces venció al estadounidense Denis Kudla por 6-1 y 6-4. Luego superó al australiano John-Patrick Smith y al francés Jeremy Chardy, y cayó en semifinales ante el estadounidense Sam Querrey.