Una “jaula” que cayó del techo del escenario en el debut de la obra que comparten Carmen, Federico y Santiago Bal, casi impacta en el veterano actor. Pudo ser una tragedia pero, rápidos de reflejos, los cómicos usaron el incidente para hacer reír a la gente con chistes
El martes a la noche fue el estreno en la cartelera de Buenos Aires de la revista “Nuevamente Juntos” en el teatro Multitabaris en la Avenida Corrientes. Y no fue un debut feliz: en medio de la obra un desperfecto técnico pudo haber causado una tragedia a Santiago Bal, quien en la escena a solas en un bar con su hijo, Federico Bal, casi es impactado por una jaula que casi cae justo en la cabeza del veterano actor. Como corolario, Carmen Barbieri, quien esperaba detrás de escena para salir, le puso humor a la situación: “¡Ni esto lo mata al viejo!”, dijo rápida de reflejos, y el público estalló en una gran carcajada.
La revista cuenta la historia de la familia, es autorreferencial, y en todo momento se bromea con mucha ternura con “la siete vidas de Santiago Bal” tras superar infinidades de internaciones. Además, se hace hincapié en la separación de siete años atrás entre ambos padres de Fede y en toda la artillería mediática que se tiraron. Mejor dicho, Carmen era la que tomaba, por lejos, la delantera con su verborragia. Hoy los dos, siguen separados, pero tienen buena relación al punto de poder trabajar juntos.
En la escena en cuestión, Federico Bal, quien se dio cuenta enseguida lo que sucedía, se fue de libreto y empezó a gritar a viva voz: “!La jaula!” y como el personal técnico hacía oídos sordos, se levantó de la silla, corrió al padre y atajó la jaula de 600 kilos para que no caiga con todo el peso.
La reacción de Santiago Bal fue de un susto bárbaro: se paró también de la silla y su hijo lo corrió. Cuando se dio cuenta lo que hubiera pasado, se empezó a agarrar la cabeza. Fede para tranquilizarlo y seguir con la obra, le dijo: “Tranquilo papá, bueno ahora respirá hondo”. Es ahí cuando de repente aparece de manera histriónica Carmen con su famosa frase: “No te mata nada Santiago”.
El percance se hizo carne en la obra hasta la escena final, cuando Carmen y Santiago están a solas en el escenario y ella se sale del libreto: “Mi mamá decía que éste (por Santiago) va a enterrar a todos. Ella está ahora en el cielo y ahora yo creo que todavía Dios no te quiere abrir la puerta. ¿Cuántos años pensás vivir, Santiago?”. A lo que el capocómico (uno de los que en la obra es homenajeado en el marco de un gran honor a los mejores nombres de la revista), contestó: “Unos veinte años más. Y más aún si tu mamá me está esperando en el cielo”. Otra vez el público estalló
Al final de la obra, Federico Bal explicó el motivo del accidente con suerte: “Nosotros en Mar del Plata trabajamos en un escenario que es el doble que éste. Fue un error técnico. Detrás pasa de todo, salió todo excelente, el percance lo terminamos pasando a humor y le dijimos ‘no te mata nada Santiago’”.