La diferencia entre el precio de origen y el de destino de los alimentos llega en promedio a superar el 500%.
La brecha de precios de productos agropecuarios entre lo que pagó el consumidor y lo que recibió el productor “subió un 2,3% en marzo frente a febrero”, según un relevamiento realizado por la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME).
En promedio, los consumidores pagaron 5,23 veces más de lo que cobró el productor por sus productos en la tranquera de sus campos y las mayores diferencias se verificaron en la naranja (15,34 veces), la mandarina (8,9 veces) y en la pera (8,33 veces).
Los datos surgen del Índice de Precios en Origen y Destino (IPOD) que elabora el área de Economías Regionales de CAME. En marzo, el IPOD agrícola subió 2%, llevando su brecha a 5,75 veces, la que resultó a la vez 18,3% mayor a la del mismo mes del año pasado.
El IPOD ganadero, en tanto, subió 4,5%, ubicándose en 3,72 veces, principalmente debido a una recomposición del precio en góndola de las carnes de cerdo y novillito.
Los cambios del mes “responden a movimientos estacionales y a otros habituales de los productos, donde el efecto de subas en las brechas fue más intenso que el de aquellos donde se redujo”, sostuvo el informe de CAME.
“De los 25 productos relevados, en 13 se incrementaron las brechas y en 12 se redujeron”, indicaron.
A su vez, la participación del productor en el precio final “mejoró levemente” y subió 2,2%, de 22,3% en febrero a 22,8% en marzo.