Funcionarios de la Embajada venezolana en Costa Rica abandonaron ese país al finalizar el plazo de la orden de expulsión decretada por las autoridades locales el pasado 15 de febrero. El Ejecutivo costarricense había dado 60 días al personal diplomático. Tras ese lapso de tiempo vencerían sus credenciales, inmunidades y privilegios.
A través de un comunicado, el Ministerio de Relaciones Exteriores confirmó que “el personal diplomático del régimen de Nicolás Maduro, que se desempeñaba en la Embajada de Venezuela en Costa Rica, ha dejado el territorio nacional”. “Para todos los efectos, ya no son reconocidos como representantes de Venezuela”, añadieron.
El Gobierno costarricense fue uno de los primeros en reconocer al diputado opositor venezolano Juan Guaidó como presidente encargado cuando este se autoproclamó el pasado 23 de enero.
El asalto a la Embajada
La Embajada venezolana en San José fue escenario de un conflicto el pasado 20 de febrero. Ese día un grupo de personas, encabezadas por la “embajadora” designada por Guaidó, María Faría, intentó ingresar por la fuerza al edificio de la sede diplomática.
Ante el reclamo del ministro de Relaciones Exteriores venezolano, Jorge Arreaza, la vicecanciller de Costa Rica, Lorena Aguilar, aseguró que esa acción lesionó “las elementales normas de respeto y confianza en el marco del Derecho Internacional”.
“Expresamos nuestro más enérgico rechazo ante la actuación de María Faría”, añadió Aguilar en aquel momento y remarcó que todavía estaba en vigencia el plazo de 60 días dado a los diplomáticos en funciones