Con 29 años, Lauren Wasser se convirtió en una abanderada para advertir sobre el riesgo de los tampones y del síndrome del shock tóxico.
Lauren Wasser había se hizo conocida porque perdió la pierna derecha en 2012 producto de una infección provocada por un tampón y pasó seis años intentando recuperarse. Pero ahora perdió la otra pierna
.
Desde aquella primera pérdida había comenzado a militar para que las mujeres conozcan el peligro que corren al utilizar estos productos. Ahora declaró tras la intervención: “La vida solo va a mejorar y que tengo mucha vida para vivir”.
Su mensaje esperanzador la había llevado a la revista Forbes, que destacó a la californiana de 29 años como una de las treinta personas menores de 30 años más relevantes del año.
En su lucha, busca que las mujeres se replanteen la forma en que usan los tampones y estén al tanto del síndrome del shock tóxico (SST), una infección tan poco común como riesgosa originada por bacterias que se encuentran en la piel, nariz, axilas, ingle y vagina.