El candidato presidencial del kirchnerismo Alberto Fernández recibió el alta médica tras estar internado desde el lunes por una afección pulmonar. Antes de dejar el Sanatorio Otamendi, dio detalles de su dolencia y aseguró que sintió un dolor tremendo. “Es un dolor horrible, llegué con ese problema y una tos muy seca que todavía tengo, que estaba generada por la irritación de la pleura. Entonces me medicaron y me pusieron por vía intravenosa calmantes muy fuertes con morfina”.
Además, confirmó que está anticoagulado desde hace diez años por episodios de trombos que tuvo en el pasado y que los médicos le recomendaron que siga así.
Tras salir del Otamendi este jueves por la mañana dijo que “volverá a trabajar” normalmente.
“Empezaron a detectar cuál podía ser la causa”, agregó el ex jefe de Gabinete. “Yo había tenido diez años atrás un cuadro de un trombo en el pulmón y temieron que podía ser algo así. El trombo dejó una cicatriz en el pulmón, que es lo que llaman infarto pulmonar, pero temían que esa cicatriz y la tos seca hubieran generado la irritación en la pleura”.
Alberto Fernández ingresó el lunes al Sanatorio Otamendi. En principio había asegurado que llegó por una tos y que se quedó internado para realizarle chequeos, pero luego se supo que el cuadro era más grave y se apuntaba a una tromboembolia pulmonar, un cuadro que ya había tenido en 2008 cuando dejó de ser jefe de Gabinete.
De hecho, en sus explicaciones dio a entender que él sufrió una tromboembolia, como había publicado Clarín. “Tal vez había un pequeño coágulo que estuvo y se disolvió y generó ese problema. Lo que decidieron fue dejarme esa noche y después viene mi médico y me dice que ya que estaba en el lugar me revisen todo. Las arterias, las venas, el sistema circulatorio, los análisis integrales cardíacos, y vamos descartando y así empezás tu campaña tranquilo”
Fernández dijo que llegó al sanatorio por sus propios medios y que cuando ingresó no tenía dolores en la pierna ni en el pecho.
“La recomendación que me dieron es que siga como estoy desde hace diez años anticoagulado. El problema de la formación de coágulos es que no se conoce el origen, no está predeterminado entonces preventivamente te anticoagulan”, dijo Fernández. Su madre sufría trombofilia y su hermana tuvo una trombosis originada en las piernas. El antecedente no es menor ya que según los especialistas la patología puede ser hereditaria.
“Estoy anticoagulado hace 10 años y mi vida es absolutamente normal, tomo la pastilla para la anticoagulación todos los días”.
El miércoles, en entrevistas radiales, intentó negar que hubiera tenido una embolia pulmonar, pero el parte del Otamendi describe las características típicas de una tromboembolia, aunque sin nombrarla. La dolencia produce una obstrucción arterial que genera presión sobre la pleura que se irrita y genera dolor.
El parte decía que sufrió una “inflamación pleural” que podría corresponder “a una obstrucción arterial subsegmentaria”.