25 días después de la masacre de San Miguel del Monte, Rocío Quagliarello (13) recibió el alta médica: volvió a su hogar. Por la mañana, la familia emitió un comunicado para avisar la noticia. Lo pronunció su tío, el abogado Ricardo Minoli: “Quería comunicarles que hoy 13 de julio, sin saber precisar el horario, le darán el alta a Rocío. Estamos sorprendidos de su evolución. Damos gracias a Dios y a todos los que han apoyado con sus oraciones, a todas las personas por el grado de colaboración y respeto. Quiero solicitar a toda la población que traten de no apurarse para visitarla, ya que la queremos preservar por un tiempo prudente”.
A Rocío la tuvieron que intervenir de urgencia por una herida en el hígado no bien ingresó al hospital. Estuvo internada en terapia intensiva pediátrica y sus principales complicaciones radicaron en sus pulmones. Experimentó mejorías constantes y satisfactorias. Le quitaron el respirador artificial a principios de mes. La operaron de la mandíbula y de quebraduras en un brazo, una pierna y un tobillo.
A la joven ya le contaron que sus amigos fallecieron producto del impacto. Por eso se encuentra bajo tratamiento psicológico y en proceso de rehabilitación por su operación en la mandíbula.
Sus familiares habilitaron a que la comunidad de Monte, a que sus amigos le dieran una bienvenida en la puerta de su casa. Habrá carteles y mucha emoción en una ciudad que todavía no se recupera de la persecución fatal en la que fallecieron cuatro jóvenes. Una vez que se recupere, el aporte de Rocío será clave para esclarecer una causa que lleva trece personas detenidas, doce de ellos policías.