La frase “La única relación que Rosalía tenía, realmente sana, era con Juan” puede sonar tremenda o coherente, según quién la oiga. Para la familia de Rosalía Jara seguro que es una frase repudiable. En cambio, para Juan Valdéz, el único detenido por la desaparición y muerte de la joven madre, la frase puede oírse “correcta”.
El abogado defensor de Valdéz, Jorge Bedouret, sostiene que su defendido es inocente y que no habló porque ya lo hizo cuando comenzó la investigación. Además, Bedouret tiene su propia teoría. Para él, la justicia debería investigar a Anacleto Aranda, quien estaba en pareja con Rosalía y quien le había exigido un ADN para corroborar la paternidad de la menor, situación que se iba a dilucidar el 3 de Julio, dos días después de la desaparición de Rosalía. Bedouret afirma que la justicia no investigó esa pista y agrega que Aranda aparece en el registro de las últimas llamadas que mantuvo Rosalía en su teléfono celular.
“Nunca se investigó a un tal Aranda, el marido ha tenido públicamente situaciones de violencia, con armas inclusive, y nunca se investigó”, sostuvo Bedouret.
