El condenado tiene 46 años y siete hijos en total. En un juicio abreviado, se probó la violación de una de sus hijas, el abuso simple de otra y la corrupción de esta última y de uno de sus hermanos.
Un hombre de 46 años cuyas iniciales son CEH fue condenado a 11 años de prisión como autor de delitos contra la integridad sexual cometidos entre 2005 y 2012 en perjuicio de tres de sus hijos –los tres menores de edad– en Santo Domingo (departamento Las Colonias).
CEH fue condenado como autor penalmente responsable de los delitos de abuso sexual con acceso carnal agravado (por el vínculo con la víctima) cometido de manera reiterada en un número indeterminado de ocasiones en perjuicio de una de sus hijas. También se lo condenó como autor del delito de abuso sexual simple agravado (por el vínculo con la víctima) cometido en tres ocasiones en perjuicio de su otra hija mujer. Por último, fue condenado como autor penalmente responsable del delito de corrupción de menores de 18 años agravado (por el vínculo con las víctimas) en perjuicio de una de las niñas y de su hijo varón, también menor de edad. Los tres delitos concurren en forma real entre sí.
La sentencia fue resuelta por el tribunal integrado por los jueces Jorge Pegassano (presidente), Gustavo Urdiales y Rodolfo Mingarini. La decisión de los magistrados fue en el marco de un juicio en el que se abreviaron los prodecimientos, al cual se arribó luego de haber comenzado el juicio oral y público –el lunes 10 de junio– en los tribunales de la ciudad de Santa Fe.
Denuncia
Los ilícitos fueron cometidos antes del 10 de febrero de 2014, por lo tanto, se trata de una investigación del anterior sistema procesal penal santafesino. A raíz del traspaso de estos legajos al MPA, la acusación y la instancia de juicio estuvieron a cargo de Mariela Jiménez.
La investigación se inició a raíz de una denuncia presentada por una de las víctimas. “Si bien los abusos se produjeron cuando era menor de edad, al cumplir los 18 años –en 2013– se presentó en la Comisaría de la Mujer de Esperanza y relató todo lo ocurrido”, explicó Jiménez.
Vínculo, convivencia y abuso
“Todos los delitos que se le atribuyeron a CEH fueron cometidos cuando sus hijos eran menores de edad y se prolongaron durante varios años”, explicó la fiscal Jiménez. En este sentido, manifestó que “el acusado abusó sexualmente de una de sus hijas desde que la niña estaba en edad escolar y durante su adolescencia, tanto en el domicilio que compartían en Santo Domingo donde CEH era empleado rural, como en un hotel al cual concurría periódicamente con la víctima, ubicado en las afueras de la ciudad de Santa Fe”.
“CEH también abusó de otra de sus hijas adolescente en tres oportunidades”, sostuvo la funcionaria del MPA y agregó que “además, obligó a esta víctima y a uno de sus hijos varones a mantener relaciones sexuales entre ellos, cuando ambos eran menores de edad, motivo por el cual también se lo acusa de corrupción de menores”.
La fiscal Jiménez sostuvo que “son de los delitos más aberrantes que se pueden cometer contra una persona, en especial porque afectan a las víctimas desde su temprana edad y en el contexto familiar, lugar donde deberían encontrar paz y seguridad para un normal desarrollo de sus vidas”. En este sentido, agregó que “el tiempo de convivencia prolongado agrava la naturaleza de los delitos que se le atribuyen a CEH, a lo que se agregan el sometimiento de las víctimas, su indefensión, el daño causado y la vulneración de sus derechos a la integridad física, psíquica y sexual”.
Identidad
La fiscal del MPA aclaró que “en este caso no informamos el nombre del condenado con el objetivo de preservar la identidad de las víctimas, teniendo en cuenta que se trata del padre biológico de las tres víctimas, quienes llevan el mismo apellido que su agresor”.