Un brutal femicidio conmociona a la provincia de Córdoba. Marianella Silva fue asesinada de tres disparos por su expareja y padre de su bebé de un año y cinco meses.
La joven ya había denunciado a Rodolfo Tissera por violencia de género. Producto de ello, le habían otorgado un botón antipánico y el hombre tenía una perimetral. Sin embargo, nada bastó para salvar su vida.
Incluso llegó a activarlo antes de recibir el primer disparo. Después siguieron otros dos. No pudo evitar que su expareja la asesinara anoche en la casa que habían compartido en la ciudad de Córdoba.
Marianella y Rodolfo estaban separados desde el año pasado y tenían en común un bebé de un año. Este domingo el femicida fue a buscarla dispuesto a matarla. Le pegó dos tiros en el pecho y otro en la cabeza.
La joven, de 19 años, murió poco después en el Hospital Misericordia, pese al esfuerzo de los médicos por salvar su vida.
El abuelo de la víctima, Juan Carlos, aseguró que el crimen “se podría haber evitado”, y detalló: “El hombre tenía una perimetral y la violó el jueves. Lo tendrían que haber detenido en el momento. Buscarlo y evitar esto”.
“Es una persona violenta. Se separaron hace unos nueve meses justamente porque la golpeó. Pensamos siempre que podía suceder esto”, afirmó. “Constantemente la hostigaba, ella no quería saber más nada”, añadió el hombre.
El acusado, de 40 años, fue detenido durante un operativo en el barrio Villa La Lonja. La policía secuestró en el lugar una moto y un arma de fuego que será peritada para determinar si fue la que usó para cometer el crimen.