La presentadora de Todas las tardes dio detalles de las razones que la llevaron a poner su boda con Juan en stand by.
A fines de noviembre pasado, Maju Lozano fue sorprendida en pleno estudio de Todas las tardes, ciclo que lidera por El Nueve, por Juan, su novio, junto a un ramo de flores. Fue entonces que la conductora mostró feliz su anillo de compromiso y habló de los preparativo de su boda en vivo.
“Ya pusimos fecha. ¡Estoy con taquicardia desde ayer! Pero la verdad es que pienso ‘tengo 47, ¿cuánto más puedo vivir?’. Él no puede casarse por Iglesia, pero algo haremos alguna bendición o algo. Para casarnos por Civil primero le tiene que salir el divorcio a él. Pero yo puedo ponerle excusas, porque soy la que tiene más miedo”, decía ante las cámaras, previo a conocerse que el día elegido era el 31 de agosto de este año.
Sin embargo, Lío Pecoraro -compañero de Maju- anunció este viernes que la presentadora había decidido suspender su boda. A lo que Lozano dio más detalles sobre esta información: “¡Me dejaron! No, mentira… me toco la izquierda. ¡No, que el universo no me haya escuchado!”, comenzó diciendo, con su característico humor.
“Lo que pasa es que nos acabamos de mudar y estamos con la cabeza así, es mucho gasto y no es un momento para casarse. Nos íbamos a casar el 31 de agosto”, agregó, en referencia a los motivos que la llevaron a poner su casamiento en stand by.
Y cerró, entre risas: “Decidimos estirarlo un poco. ¿Si está todo bien? Sí, creo que sí. No, si , todo muy bien. En realidad no los quiero invitar a ustedes, entonces no lo hago”.
En pareja desde hace un año, Maju es madre de Joaquín (7), fruto de su relación con Julián Varde, mientras que Juan también es padre de Sol (10) y Amparo (7), frutos de su matrimonio anterior.