Alrededor de las 9.30 del viernes, tres delincuentes llegaron hasta una casa ubicada en Irigoyen Freyre 3000 y robaron de manera violenta. Los cacos estaban disfrazados de empleados del correo, ella esperaba un encomienda.
Al momento del robo, la señora jubilada dueña de la casa se encontraba sola y tres delincuentes, que se hicieron pasar por empleados del correo, aprovecharon para ingresar al domicilio. Al enterarse del suceso, el marido de la mujer llegó rápidamente a su vivienda y constató que la casa estaba “dada vuelta”.
Tras recorrer las habitaciones se dio cuenta que faltaban los $300.000 que estaban dentro de una caja fuerte. La víctima del robo sufrió lesiones por los golpes que le propinaron los delincuentes.