Según una encuesta, más del 70 % de las mujeres policías afirma haber sufrido violencia de género, según revela un trabajo con más de 300 encuestas realizadas por la Red de Mujeres Policías, Penitenciarias y del IAPIP.
De ese porcentaje, la mayoría de las acciones tienen que ver con violencia psicológica, en un 56 %, simbólica, en un 25,8 % mientras que un 8,1 % sufrió violencia sexual, 5,6 % sometimientos físicos y un 4,4 % de tipo económico.
Respecto de quienes ejercieron esa violencia contra las mujeres policías, en un 69 % fueron concretadas por Jefes o Superiores, 20,6 % por compañeros de trabajo y un 10,5 % por su pareja policial.
Otros de los datos que sobresale de las consultas, es que más de la mitad de quienes contestaron son Jefas de hogar o madres solteras, un 51,6%, mientras que un 45 % mantienen familiares a cargo.
Se agrega que el 81,9 % de las mujeres policías que tomaron licencia psicológica o siquiátrico, es debido a situaciones de acoso laboral.
Según explica la Red de Mujeres Policías y Penitenciarias, la encuesta fue puesta en marcha a principios de julio del 2019, con el objetivo de visibilizar con cifras reales las situaciones de Violencia De Género.
Entre los datos recabados, se encuentran condiciones de salud, distancias entre trabajo y hogar, educación, casos sufridos en los espacios laborales, licencias otorgadas o no, entre otros.
Una de las motivaciones de esta encuesta es que no existen hasta el momento datos oficiales sobre los casos de VDG que se viven. “A pesar de esta ausencia, estamos convencidas de que se trata de una problemática grave que requiere de una solución inmediata”, explican.
“En algunos casos, la falta de información se relaciona con la negativa de muchas de las víctimas a concurrir a organismos destinados a la recepción de estas denuncias”, indican en un comunicado.
La entidad sostiene que “muchas de ellas manifestaron que perciben cierta connivencia entre los agresores y quienes están a cargo de diligenciar las denuncias porque sus casos son archivados o desestimados rápidamente, incluso a muchas les recomendaron no denunciar. En otros casos, el victimario fue “alertado” por personal de estos organismos sobre la presencia en el lugar de una mujer que se disponía a denunciarlo.
Por otro lado, en el “diligenciamiento de los expedientes de este tipo se encontraron irregularidades como la falta de toma de declaraciones a los denunciados o la no resolución de conflictos laborales graves, donde sucedieron agresiones físicas, verbales, hostigamiento, incluso casos de abuso sexual”.
Concluye el análisis, de que lo que la encuesta demuestra es que quienes sufren violencia de género dentro de las fuerzas de seguridad de la provincia no encuentran un espacio donde ser contenidas y asesoradas.