El muchacho fue brutalmente atacado tras haber protagonizado un choque sin gravedad.
En este último tiempo, la ciudad de Santa Fe se convirtió en la cuna de la violencia. Los episodios de inseguridad, homicidios y peleas incrementan con el paso de los días. Y esta semana no fue la excepción.
El pasado lunes, durante las primeras horas de la mañana, se registró un ataque brutal. Un joven se dirigía hacia su trabajo en motocicleta. Al llegar a la intersección de Av. Presidente Perón y Junín, chocó levemente contra un automóvil. Ese fue el inicio de una mañana de furia.
Tras el impacto entre la moto y el coche, el muchacho bajó de su birrodado para chequear que los pasajeros del auto estuvieran bien. Sin embargo recibió una respuesta inesperada. El dueño del rodado salió de su vehículo enfurecido, gritándole insultos y recriminaciones al joven que lo embistió sin gravedad.
En ese momento, apareció un hombre en su bicicleta que atestiguó el choque para defender al motociclista. El testigo sostuvo que el dueño del auto fue el culpable del siniestro vial, ya que no había activado el guiño de su vehículo. Ese comentario fue el desencadenante de lo peor.
El propietario del Chevrolet Onix, fuera de sí, amenazó al joven con sacar un arma de su vehículo. En consecuencia, el muchacho huyó rápidamente del lugar. No obstante, el conductor del auto lo persiguió hasta lograr embestirlo y hacer que caiga de su vehículo. Una vez en el piso, el motociclista fue golpeado sin cesar, hasta casi perder el conocimiento.
En dialogo con Radio EME, Bruno, el joven atacado salvajemente, relató el calvario que sufrió durante el comienzo de esta semana: “La manera en la que fui golpeado fue impresionante. Fue tan solo un choque leve. Me bajé para ver si estaba bien, y luego me empezó a gritar e insultar”. Luego de la llegada del testigo que intentó defenderlo, se escapó por miedo a la amenazas. “Él estaba muy furioso. Cuando me amenazó con el arma, escape porque tenía miedo”, comentó la víctima del ataque.
Luego, al llegar a la intersección de Av. Freyre e Hipólito Irigoyen, Bruno fue interceptado por el chofer del auto, y fue impactado. Ya en el piso, se desarrolló la grave golpiza que lo dejó con grandes secuelas. “En dos segundos ya lo tenía encima mio golpeándome, hasta casi dejarme inconsciente”, mencionó el muchacho lastimado. Además agregó: “Había gente que grababa, pero nadie me quiso ayudar”.
Por su parte, aseguró que la Policía mostró mucho desinterés en querer ayudarlo: “La Policía no quiso ayudarme mucho. Estuvo más de su lado que de mi lado”.
A su vez, Mario, padre de la víctima, reveló: “La Policía actuó mal. Lo dejó ir porque necesitaba llevar a la esposa al trabajo. Les había dicho que se iba a presentar voluntariamente en la Comisaría. Pero no sucedió. No sabemos como va a seguir esto”.
También remarcó que le robaron las pertenencias a su hijo: “Le robó su mochila con todas sus pertenencias y su documentación”.
Por último, afirmó que Bruno padeció de un golpe muy fuerte en el ojo izquierdo. Además de una una fractura en la nariz. “Sufrió varios golpes en la cabeza. Hasta que no se descinche no sabremos que secuelas tendrá”, concluyó.