El titular de la Cámara de Empresas Inmobiliarias de Rosario (Cadeiros), José Elena, manifestó hoy la inquietud del sector ante la retracción de las ventas y alquiler de viviendas, ante la falta de créditos hipotecarios y la devaluación, y enfatizó que “plata en el mercado hay, lo que no hay son medidas que seduzcan para comprar o para construir”.
“Esperamos que se tomen medidas que incentiven el mercado, cuando hay dinero en el mercado se generan una cantidad de acciones, se generan puestos de trabajo, se movilizan los servicios y se pagan los impuestos que provocan un efecto multiplicador que termina siendo beneficiosos para la economía”, se esperanzó Elena.
“Hace dos años que venimos padeciendo una crisis en las ventas, que no solo ha parado la actividad en sí sino dificultando el acceso a la vivienda por la desaparición de los créditos hipotecarios y por las sucesivas devaluaciones que impactaron fuertemente en el mercado”, explicó Elena
Asimismo, señaló que, como el mercado inmobiliario “está dolarizado”, trasladar esa situación, que lleva años en el país, a una población en la que todos ganan en pesos “dificulta mucho” el negocio. “Esto nos obliga a readecuar precios y condiciones en un contexto de una economía que es cada vez más acotada”, añadió.
“A eso se suman los alquileres, que no escapan a las generales del mercado, que sufrieron un aumento en los gastos y los insumos han subido en una forma exponencial ante la pérdida del poder adquisitivo de los asalariados que son, en su gran mayoría, quienes alquilan las propiedades”, comentó con preocupación Elena.
“Este es un combo que nos da un resultado de un mercado locativo con una alta tasa de desocupación”, destacó el agente de bienes raíces rosarino, y detalló: “En alquiler hay hoy, comparativamente con otros años, hay más de un 25 por ciento más de propiedades ofertadas, desocupadas tenemos más del doble, por la caída en la demanda”.
Consultado sobre el movimiento actual del mercado de los departamentos en alquiler, elena indicó que “en general estaban treinta días antes de que se lograr ocupar, hoy pasan sesenta, noventa días y a veces más, dependiendo si tiene las expensas muy altas o cuenta con algún servicio que encarece los gastos fijos”.
“Hoy un departamento desocupado le cuesta mucho al propietario, no solo por no percibir la renta sino por el mantenimiento de los pagos de expensas e impuestos”, afirmó Elena, quien aseguró que las dificultades que trae aparejada la falta de crédito y el aumento del dólar impactan dramáticamente en forma negativa en la venta y alquiler de propiedades.
“El mercado inmobiliario se caracterizó por tener una renta, intermedia o baja, pero una alta capitalización y eso daba un cierto perfil de certeza respecto de otras inversiones -siguió-. Siempre la renta se calculó en el cinco por ciento y hoy estamos en el piso más bajo, en menos del dos por ciento y eso desalienta las inversiones inmobiliarias”.
No obstante, advirtió que los argentinos siguen “invirtiendo en ladrillos”, aunque hoy “numéricamente no es un buen momento”. porque es “una forma de capitalizarse, de creer en el país, de brindar apoyo a la economía local y de brindar trabajo, porque hoy para tener un departamento alguien lo debió construir y eso activa la economía”.
Con respecto a las medidas económicas lanzadas por el gobierno nacional, Elena dijo que, aunque consideran que la situación del sector inmobiliario es “una prioridad”, ante la crisis general que vive el país “hay necesidades de primer orden”, y, en ese sentido, “habrá que buscar la forma de resolver los problemas y activar el mercado”.